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J. Camero

V. B.

Argentina y Mozambique vibran con ‘El Salto de Nijinsky’

La gira internacional de la compañía Tránsito, residente en Mataró, ofrece 14 representaciones al país sudamericano y participa al festival Kinani

Veinte días cercando Argentina y seis en Mozambique. Este ha sido el periplo otoñal de la compañía de danza Tránsito, residente en Mataró. Un tour de fuerzo para presentar el montaje El Salto de Nijinsky, estrenado en la capital del Maresme en 2007 y que, mes de dos años después, sigue recibiendo aplausos allá donde se presenta. Maria Rovira, directora de la compañía, prevé todavía "una larga vida" por este montaje, que fue galardonado con uno Pulse Butaca en 2008 y que también ha pasado por los grandes festivales veraniegos del Estado, como por ejemplo el Griego o Los Veranos de la Villa de Madrid. "Es un espectáculo que ya funciona solo, que los bailarines bailan con los ojos cerrados y que ha evolucionado mucho desde su estreno". El año 2010, además, se cumple el centenario de los Ballets Rusos de Sergei Diagilev, así que la coreografía alrededor del genial bailarín y coreógrafo Vaslav Nijinski seguirá más vigente que nunca. "En cierto modo y sin saberlo, nos avanzamos al alud de propuestas sobre bailarines rusos que habrá", destaca la coreógrafa mataronina.

Tránsito Danza realizó una gira por Argentina entre los días 6 y 26 de septiembre. Un tour esgotador, en qué representaron la obra hasta 14 veces en ciudades como Rosario, Córdoba, Santiago de Estero, Tucuman, Jujuy, Mar de Plata y finalmente en Buenos Aires. "Fue una gira preciosa", destaca Rovira, en especial por los recintos donde pudieron actuar. "Todos ellos teatros antiguos, como si fueran el Liceo, con mucha solera y siempre llenos de público". La gira se completó con varias clases y seminarios a cargo de los bailarines de la compañía a Córdoba, Mar de Plata y Buenos Aires. Rovira destaca las buenas críticos recibimientos por los medios argentinos. "La compañía Tránsito sale adelante un proyecto singular por su objetivo, y que los expone en plenitud como artistas", afirmó un crítico del diario La Nación, después de asistir a la representación de Buenos Aires, el único lugar donde no encontraron un recinto adecuado (los tocó bailar al aire libre, en el anfiteatro Eva Perón).

Un público más efusiu
muy diferente, pero todavía más excitante, fue la experiencia en Mozambique. Tránsito fue invitada a presentar El salto de Nijinksy al festival Kinani de la capital del país africano, Maputo, entre los días 3 y 8 de noviembre. La compañía no las tenía todas, pero aceptó tomar parte en una propuesta tan exótica. "Es uno de los países más pobres de África, sus habitantes tienen una esperanza de vida que no supera los 45 años", destaca Isabel Tapia, una de las bailarinas de la compañía mataronina. No sabían muy bien lo qué se encontrarían, pero finalmente el saldo fue muy positivo. "La programación tenía mucha calidad, en especial las compañías africanas, que nos sorprendieron porque estaban muy insertadas dentro de la danza contemporánea", afirma Tapia. De nuevo, El Salto de Nijinsky fue muy muy recibida por el público, mucho más efusiu que no el europeo o el argentino. "Aplauden en cualquier momento, de pura emoción si los gusta algún movimiento", destaca Tapia. Entre el público, contaron con una pandilla de niños de 10 a 13 años, estudiantes de una escuela de danza folclórica que había junto al teatro donde Tránsito tenía que actuar, y que la compañía invitó al montaje. La compañía no descarta volver al sur de África, puesto que el consulat español en Mozambique está estudiando traer la compañía mataronina a una gira por los países de la zona, como por ejemplo Zimbabwe, Madagascar o Suráfrica.