El Mataró Feimat necesitaba una carambola para poder conseguir la permanencia directa, pero no fue posible a pesar de hacer un gran partido ante el tercero clasificado: el Made in Menorca. Los unionistas disputaron n un gran enfrentamiento en el que hay que celebrar el retorno de uno de sus jugadores franquicia: Natxo Ariño. Después de una temporada en blanco por la lesión que sufrió a finales del curso pasado, el '10' volvió a la pista con 15 minutos de juego, 10 puntos y un rebote y una asistencia. Llega a tiempo por las fases de permanencia que se disputarán los dos cercanos fines de semana.
Ante los isleños, los mataronins salieron a por todas desde el primer periodo. Allá se vio un equipo muy puesto tanto en ataque como defiende, donde sólo cedieron siete puntos en el primer cuarto. En el siguiente, los unionistas siguieron con un gran ritmo de juego y ampliaron más encara las diferencias con el 19-12 que permitía ganar de 15 a la media parte.
A la reanudación, el equipo sentenció el partido ante un rival irreconeixible si se tiene en cuenta como fue el partido de la primera vuelta. Los unionistas, con un grande Serratacó y Romero (20 y 14 puntos), siguieron marcando el ritmo de partido y destrozaron su contrincante (22-6). Con todo sentenciado, el partido se equilibró en un último periodo (19-18) donde se consumó el triunfo que no impide ser penúltimos pero que sirve para coger moral de cara a los decisivos enfrentamientos que están para venir.