Por algo es el gran dominador del waterpolo estatal y ha establecido una dinastía única en la historia reciente de las competiciones domésticas. El Atlétic Barceloneta, que acumula quince ligas consecutivas, era el gran favorito en el duelo de cuartos de final de la Copa del Rey contra el Quadis CN Mataró. Y la lógica se impuso. El equipo marinero empezó el partido con un alto nivel de activación para evitar sorpresas. Al final del primer cuarto, la distancia ya era insalvable (4-0).
Las diferencias todavía se ensancharían más durante el segundo periodo. El Mataró, incapaz de encontrar soluciones ofensivas, seguía a cero. El Atlétic Barceloneta, en cambio, mantenía el tono en ataque para llegar al descanso largo con un claro 7 a 0 en el marcador. El partido ya no tenía más historia, pero el Mataró no es un equipo que se caracterice, precisamente, por bajar los brazos. Durante los últimos cuartos, el conjunto de Beto Fernández sabría competir.
De todos modos, mientras el Atlétic Barceloneta llegaría a sumar un 35% de sus goles en jugadas de superioridad (con un 50% de acierto en esta estadística), el mismo factor seguiría penalizando al equipo de Mataró; 0% en esta faceta. Todos los goles del Quadis llegaron en situaciones de igualdad. No supo sacar provecho a las jugadas de hombre de más. Al final, los parciales de 3-1 y 4-3, sobre todo este último, servirían para maquillar el resultado (14-4).
El Quadis pasa página y centra ahora la mirada en la competición liguera. Los de Mataró afrontan dos jornadas consecutivas, los próximos sábados, ante rivales que permiten plantearse el reto del seis de seis. El Canoe visitará la capital del Maresme el día 20 de este mes. Después, el día 27, el CNM jugará en la piscina del Catalunya. Si el equipo de Beto Fernández gana estos partidos certificará el liderazgo del Grupo D de la División de Honor.