Dos goles de Javi Bustos en los minutos 88 y 89 provocaron el delirio de la grada y trajeron el éxtasis al barrio. La UD Molinos era nuevo equipo de 2ª Catalana después de certificar el título liguero a 3ª. Los dos goles a las postrimerías del partido servían para cambiar el duelo contra el filial del Vilassar de Mar y poner la cirereta a uno de los mejores días en la historia del club mataroní.
La temporada del Molinos es para sacarse el sombrero. Todavía quedan tres jornadas para acabar la liga y el equipo que entrena Juanjo Palma ya es campeón. 7 victorias consecutivas, 17 partidos seguidos sin perder y un total de 82 goles a favor por sólo 30 en contra. El conjunto mataroní se ha erigido como gran dominador de su grupo de la 3ª División Catalana y ha contado, además, con grandes actuaciones individuales. Toni Martín o el mismo Javi Bustos (16 goles cada cual), pero también Jorge Manrique (12 goles) o Aitor Moreno (11) son una buena muestra del arsenal ofensivo que ha presentado el equipo durante esta temporada.
La victoria in extremis ante el Vilassar de Mar B, por otro lado, es un regalo del Molinos a otro equipo de la ciudad. El Cereza, que ganó en Montgat, se ensarta a la segunda posición y tiene ahora tres puntos de ventaja sobre el conjunto maresmenc. Incluso La Llàntia, en quinta posición con 61 puntos, todavía mantiene sus opciones de luchar por el segundo lugar y jugar la promoción de ascenso.
Hasta seis equipos mataronins compiten en este grupo de 3ª Catalana. La UD Molinos ha brillado por encima de todos.