Una derrota que cumple los peores presagios ante un campeón, la Español B, que está a otro nivel. El CE Mataró cerró un mes de marzo excel•lento. El equipo parecía salvado, puesto que tenía que recibir rivales directos como Cornellà o Balaguer, y visitar a otro de sus contrincantes de la parte baja, la Rapitenca. Pero los amarillo-y-negros se deshincharon. O, simplemente, dejaron de jugar por encima de sus posibilidades como habían hecho jornadas atrás. Y mientras se perdían ocasiones claras (en casa, rivales directos), había una sombra en la lejanía que amenazaba: los cuatro últimos partidos ligueros con cuatro equipos de la parte alta. Pasados tres rivales, pleno de derrotas, y descenso. La última, ante el campeón. Un Español B que ayer domingo pisó en sólo 45 minutos un CE Mataró que ha llegado sin fuerzas al tramo final de temporada. Cuando se deciden las competiciones.
El partido sólo tuvo la historia que los campeones quisieron. Una primera parte amodorrada, con pocas ocasiones y un Español que parecía jugar deliberadamente con un par de marchas menos. Los mataronins no se acercaron a la portería hasta el minuto 44, cuando Víctor Duran comprobó en un remado de ninguno la enorme calidad del portero Isaac. En la reanudación, en un córner Dídac (ex-amarillo-y-negro), hizo el 0-1. Esto fue como una jarra de agua fría. Los mataronins intentaron ir al ataque pero sin éxito, y a la contra los pericos destrozaron el equipo de Creixell. Cruces, otro ex-amarillo-y-negro, hizo el segundo a la contra poco después de que Creixell animara los suyos recordando que Palamós y Balaguer "van uno a uno". Matamala cerró la goleada que podría haber sido escandalosa si no llega a ser por la carencia de acierto en los metros finales. El Palamós ganó 2-1 y col•loca en descenso directo los amarillo-y-negros.
El pecado del conjunto amarillo-y-negro no ha sido ir perdiendo la ventaja respeto el Palamós en este último mes de competición, sino su nefasta gestión deportiva desde que empezó la temporada. Todos los problemas que se han ido arrastrando empiezan a aflorar en una situación límite. Creixell dijo en rueda de prensa que "todo el mundo tiene el que siembra". Pues sí: se prescindió de jugadores como Rubén, Villén, Vicente o Marc Ariño, jugadores que procedentes de la base mataronina, estarían dando el don de pecho hasta el último momento. A su lugar, Toni Muñoz, Pelegrín (un entrenamiento duró), Carricondo y otros 'nombres' que a la hora de la verdad se han esfumado. El ojo clínico para rastrear el mercado este golpe ha hecho llufa y el resultado final es el de una plantilla demasiado corta tanto en efectivos como en calidad. Con los de la casa, al menos se hubiera tenido un plus más como el que aportan semana detrás semana jugadores como Imanol, Sauras, Víctor Duran o Ramon. Gente que se ha arraigado aquí por uno u otro factor y que no ha abandonado el barco a las primeras de cambio.
El técnico sigue perdiendo crédito
Los resultados no acompañan, la relación de Creixell con los jugadores es tenso (propiciado por su decisión constante de dar la espalda a la plantilla en los momentos importantes de la temporada) y cada vez que sale a rueda de prensa sube el pan. Domingo, después de la derrota, no tuvo problemas al asegurar que pagaría una mariscada a los jugadores del Prat (rival del Palamós en la última jornada) aunque "tenga que pedir un crédito". Una mariscada que seguramente hubiera entrado más de buen grado a la plantilla del Mataró cuando la situación económica era crítica, en ninguna parte de ver como el entrenador se alineaba con la directiva.
También aseguró que quien no saliera a Santo Boi a dejarse la piel sería "un hijo de mala madre". Dirigidas a jugadores que no se los puede reprochar nada por la suya entrega y lucha constando, acompañen o no los resultados, las palabras de Creixell podrían ser una manera de allanar el terreno para buscar culpables de última hora. Eso sí, el técnico va asegura que esta situación ya lo había "predicho meses atrás". Hace pocas semanas había dicho que el equipo se salvaría, pero. Ahora le empieza a ver las orejas al lobo.
Jornada de transistores
El CE Mataró agotará sus últimas opciones sin Mechi ni Sauras, que cumplen ciclo de tarjetas y no pueden jugar (unas bajas que Creixell lamentó debido de a los pocos efectivos con los que cuenta). El partido será domingo a las 17.00h ante el Santboià, conjunto que se está jugando entrar al play-off. A los de Santo Boi sólo los vale ganar, puesto que de momento son cuartos y lo tienen en sus manos. El Palamós visitará el equipo de la mariscada, el Prat, y el Balaguer recibirá el Hospitalet. Dos partidos complicados, como lo de los mataronins.
El partido sólo tuvo la historia que los campeones quisieron. Una primera parte amodorrada, con pocas ocasiones y un Español que parecía jugar deliberadamente con un par de marchas menos. Los mataronins no se acercaron a la portería hasta el minuto 44, cuando Víctor Duran comprobó en un remado de ninguno la enorme calidad del portero Isaac. En la reanudación, en un córner Dídac (ex-amarillo-y-negro), hizo el 0-1. Esto fue como una jarra de agua fría. Los mataronins intentaron ir al ataque pero sin éxito, y a la contra los pericos destrozaron el equipo de Creixell. Cruces, otro ex-amarillo-y-negro, hizo el segundo a la contra poco después de que Creixell animara los suyos recordando que Palamós y Balaguer "van uno a uno". Matamala cerró la goleada que podría haber sido escandalosa si no llega a ser por la carencia de acierto en los metros finales. El Palamós ganó 2-1 y col•loca en descenso directo los amarillo-y-negros.
El pecado del conjunto amarillo-y-negro no ha sido ir perdiendo la ventaja respeto el Palamós en este último mes de competición, sino su nefasta gestión deportiva desde que empezó la temporada. Todos los problemas que se han ido arrastrando empiezan a aflorar en una situación límite. Creixell dijo en rueda de prensa que "todo el mundo tiene el que siembra". Pues sí: se prescindió de jugadores como Rubén, Villén, Vicente o Marc Ariño, jugadores que procedentes de la base mataronina, estarían dando el don de pecho hasta el último momento. A su lugar, Toni Muñoz, Pelegrín (un entrenamiento duró), Carricondo y otros 'nombres' que a la hora de la verdad se han esfumado. El ojo clínico para rastrear el mercado este golpe ha hecho llufa y el resultado final es el de una plantilla demasiado corta tanto en efectivos como en calidad. Con los de la casa, al menos se hubiera tenido un plus más como el que aportan semana detrás semana jugadores como Imanol, Sauras, Víctor Duran o Ramon. Gente que se ha arraigado aquí por uno u otro factor y que no ha abandonado el barco a las primeras de cambio.
El técnico sigue perdiendo crédito
Los resultados no acompañan, la relación de Creixell con los jugadores es tenso (propiciado por su decisión constante de dar la espalda a la plantilla en los momentos importantes de la temporada) y cada vez que sale a rueda de prensa sube el pan. Domingo, después de la derrota, no tuvo problemas al asegurar que pagaría una mariscada a los jugadores del Prat (rival del Palamós en la última jornada) aunque "tenga que pedir un crédito". Una mariscada que seguramente hubiera entrado más de buen grado a la plantilla del Mataró cuando la situación económica era crítica, en ninguna parte de ver como el entrenador se alineaba con la directiva.
También aseguró que quien no saliera a Santo Boi a dejarse la piel sería "un hijo de mala madre". Dirigidas a jugadores que no se los puede reprochar nada por la suya entrega y lucha constando, acompañen o no los resultados, las palabras de Creixell podrían ser una manera de allanar el terreno para buscar culpables de última hora. Eso sí, el técnico va asegura que esta situación ya lo había "predicho meses atrás". Hace pocas semanas había dicho que el equipo se salvaría, pero. Ahora le empieza a ver las orejas al lobo.
Jornada de transistores
El CE Mataró agotará sus últimas opciones sin Mechi ni Sauras, que cumplen ciclo de tarjetas y no pueden jugar (unas bajas que Creixell lamentó debido de a los pocos efectivos con los que cuenta). El partido será domingo a las 17.00h ante el Santboià, conjunto que se está jugando entrar al play-off. A los de Santo Boi sólo los vale ganar, puesto que de momento son cuartos y lo tienen en sus manos. El Palamós visitará el equipo de la mariscada, el Prat, y el Balaguer recibirá el Hospitalet. Dos partidos complicados, como lo de los mataronins.