Marc Esteban consiguió un gol importante de cara a la salvación. El joven jugador, lesionado en el último partido en casa con la Igualada, entraba de refresco en un triple cambio en la segunda parte. Cuando la derrota por la mínima parecía un hecho, el jugador recogía una pelota muerta al segundo palo dentro de una área llena de jugadores locales y visitantes y reventaba la pelota al palo largo. 1-1 y el descenso queda ya a tres puntos. 91 minutos antes, el CE Mataró se había mostrado incapaz de hacer un gol y ni tanto sólo de crear suficiente peligro a la portería de un Banyoles que vendía de cinco victorias consecutivas y que, en el primer tiempo, se había encontrado con un regalo del debutante Flavio. El Manresa, con 26 puntos, se queda en zona de descenso y Masnou y Balaguer, con 23 y 20 puntos respectivamente, parece que se descuelgan de la lucha para salvar la categoría.
El partido empezó con una novedad destacada en el once inicial: Flavio debutaba bajo palos en detrimento de Imanol. Desde la llegada del portero argentino, el joven mataroní había encadenado grandes actuaciones evitando la titularidad del recién llegado. Un error la semana pasada de Imanol que le costó el gol a los amarillo-y-negros parecía ayer haber sido el motivo, insuficiente si se coloca en el otro lado de la balanza los puntos salvados por el joven mataroní, para hacer cambio a la portería. En el minuto seis, un gran cambio de juego de Mourad hacia Callicó acababa con una centrada de este a boca de gol, donde Carrión no llegó por los pelos. Fue la única ocasión clara en toda la primera parte de los amarillo-y-negros. Por el contrario, el Banyoles no disfrutó de aproximaciones con suficiente peligro, hasta que una pelota que se perdía a córner, Flavio la envió directamente a los pies de Pitu, quien a portería vacía penjaba la esférica dentro del área pequeña, donde Gonzàlez hacía el 0-1. A los postres, fue peor el remedio que la enfermedad con el cambio bajo palos. Cuando menos, no se ofreció ninguna garantía de mejora.
En la reanudación, los amarillo-y-negros avisaron en el primer minuto con un chut lejano. Cinco minutos después, Callicó lo probaba de falta directa, pero Gerard sacaba una mano prodigiosa que evitaba el empate. Por su parte, el Banyoles tuvo sobre el minuto 15 la ocasión más clara del partido. Sile marchaba por piernas de la defensa mataronina y regateaba Flavio. su chut, pero, marchaba fuera. Creixell se la jugaba y hacía tres cambios de golpe, dando entrada Ramon, Uri y Marc Esteban. Uri tuvo el gol a sus botas en engaltar una pelota que caía del cielo. La volea marchó fuera por poco. El CE Mataró seguía cerrando el Banyoles dentro del campo rival, a pesar de que no llegaban las ocasiones claras. A un cuarto temprano por el final, los visitantes se quedaban con diez hombres por doble amonestación de Gonzàlez. Poco después, Sauras ponía el ay al corazón a los forofos mataronins con un mal gesto al caer de un salto. Se dispararon las alarmas al parecer que podría haber tenido algún problema a la rodilla, pero por suerte el capitán volvió al campo pocos minutos después. Ya en tiempo añadido, un còrner acabó con una pelota al segundo palo, donde Marc Esteban remataba de volea, ajustando la pelota al palo largo y empatando el encuentro.
La próxima jornada, los mataronins visitarán el Reos, segundo clasificado y que sólo ha perdido dos partidos en toda la temporada.
El partido empezó con una novedad destacada en el once inicial: Flavio debutaba bajo palos en detrimento de Imanol. Desde la llegada del portero argentino, el joven mataroní había encadenado grandes actuaciones evitando la titularidad del recién llegado. Un error la semana pasada de Imanol que le costó el gol a los amarillo-y-negros parecía ayer haber sido el motivo, insuficiente si se coloca en el otro lado de la balanza los puntos salvados por el joven mataroní, para hacer cambio a la portería. En el minuto seis, un gran cambio de juego de Mourad hacia Callicó acababa con una centrada de este a boca de gol, donde Carrión no llegó por los pelos. Fue la única ocasión clara en toda la primera parte de los amarillo-y-negros. Por el contrario, el Banyoles no disfrutó de aproximaciones con suficiente peligro, hasta que una pelota que se perdía a córner, Flavio la envió directamente a los pies de Pitu, quien a portería vacía penjaba la esférica dentro del área pequeña, donde Gonzàlez hacía el 0-1. A los postres, fue peor el remedio que la enfermedad con el cambio bajo palos. Cuando menos, no se ofreció ninguna garantía de mejora.
En la reanudación, los amarillo-y-negros avisaron en el primer minuto con un chut lejano. Cinco minutos después, Callicó lo probaba de falta directa, pero Gerard sacaba una mano prodigiosa que evitaba el empate. Por su parte, el Banyoles tuvo sobre el minuto 15 la ocasión más clara del partido. Sile marchaba por piernas de la defensa mataronina y regateaba Flavio. su chut, pero, marchaba fuera. Creixell se la jugaba y hacía tres cambios de golpe, dando entrada Ramon, Uri y Marc Esteban. Uri tuvo el gol a sus botas en engaltar una pelota que caía del cielo. La volea marchó fuera por poco. El CE Mataró seguía cerrando el Banyoles dentro del campo rival, a pesar de que no llegaban las ocasiones claras. A un cuarto temprano por el final, los visitantes se quedaban con diez hombres por doble amonestación de Gonzàlez. Poco después, Sauras ponía el ay al corazón a los forofos mataronins con un mal gesto al caer de un salto. Se dispararon las alarmas al parecer que podría haber tenido algún problema a la rodilla, pero por suerte el capitán volvió al campo pocos minutos después. Ya en tiempo añadido, un còrner acabó con una pelota al segundo palo, donde Marc Esteban remataba de volea, ajustando la pelota al palo largo y empatando el encuentro.
La próxima jornada, los mataronins visitarán el Reos, segundo clasificado y que sólo ha perdido dos partidos en toda la temporada.