Marc Forcada considera que su adiós repentino del Playas de Mataró se debe de a los rumores que lo colocaban la próxima temporada al Boet. "El bajo rendimiento cae por si suele si se miran los números que tenía a Copa Cataluña, y los problemas con el pre mine que entrenaba son mentira porque los padres me han negado estar enfadados conmigo y, al contrario, me han dado todo el apoyo en este asunto", explica. Por él, por lo tanto, todo desemboca en su supuesto futuro deportivo: "Es un tema de la guerra que tienen con el Boet, donde ha emigrado mucha gente cabe allá en los últimos tiempos". Forcada niega que tuviera nada cerrado con el otro equipo de la ciudad.
Según él, el Boet y otros equipos "de Copa Cataluña y de EBA" se pusieron en contacto con él de cara a la próxima temporada, y su respuesta sería que "lo tendría en cuenta" cuando acabara la temporada, pero "no había nada cerrado con nadie". "En esta época los equipos empiezan a planificar, el mismo presidente del Mataró Joan Ventura intentó fichar Sergi Homs por ejemplo", recuerda.
Forcada lamenta también las acusaciones de falta de compromiso, teniendo en cuenta que "cuando volví de la lesión de la rodilla estuve jugando con el primer equipo y también con el segundo para intentar ayudar a salvarlos mientras otros del primer equipo, salidos del plantel, se negaron". Forcada considera que sus números demuestran que no es cierto que su rendimiento fuera bajo, y en todo caso critica la manera en que se ha dado todo: "Si el entrenador, que es quien decide ir a la junta a decir que no me quiere, cree que no estaba a un buen nivel porque no vino a decírmelo antes a mí? Cómo es que no me dijo nunca que estaba descontento si tenemos confianza y lo consideraba amigo?".
El jugador admite estar entristecido por esta marcha, puesto que "tengo un carinyo especial por un equipo donde he vivido muchas cosas en nivel deportivo, he hecho grandes amigos y he mejorado como jugador".
Según él, el Boet y otros equipos "de Copa Cataluña y de EBA" se pusieron en contacto con él de cara a la próxima temporada, y su respuesta sería que "lo tendría en cuenta" cuando acabara la temporada, pero "no había nada cerrado con nadie". "En esta época los equipos empiezan a planificar, el mismo presidente del Mataró Joan Ventura intentó fichar Sergi Homs por ejemplo", recuerda.
Forcada lamenta también las acusaciones de falta de compromiso, teniendo en cuenta que "cuando volví de la lesión de la rodilla estuve jugando con el primer equipo y también con el segundo para intentar ayudar a salvarlos mientras otros del primer equipo, salidos del plantel, se negaron". Forcada considera que sus números demuestran que no es cierto que su rendimiento fuera bajo, y en todo caso critica la manera en que se ha dado todo: "Si el entrenador, que es quien decide ir a la junta a decir que no me quiere, cree que no estaba a un buen nivel porque no vino a decírmelo antes a mí? Cómo es que no me dijo nunca que estaba descontento si tenemos confianza y lo consideraba amigo?".
El jugador admite estar entristecido por esta marcha, puesto que "tengo un carinyo especial por un equipo donde he vivido muchas cosas en nivel deportivo, he hecho grandes amigos y he mejorado como jugador".