El Colegio de Geólogos de Cataluña plantea que se traslade la vía de la línea R1 de Cercanías a su paso por el Maresme por el interior y no por el litoral. No es el primer golpe que lo hace. A través del Observatorio del GeoRisc, señalan que los numerosos temporales, con su frecuencia, intensidad, y duración, sumados a la acción del hombre, hacen que la erosión predomine por encima de la sedimentación, de forma que la acumulación de arena y tierras es menor a la que se ha registrado en otras épocas. Con un incremento del nivel del mar debido de al cambio climático, hace que el mar gane cada vez más terreno a la costa: "Podemos afirmar que la mayoría de playas actuales y la R1 en su trazado actual están condenadas a desaparecer", señalan en un comunicado.
Los expertos señalan que las playas se forman con la aportación de sedimentos procedentes de ríos y rieras que desembocan al mar, y que las corrientes litorales distribuyen la arena a lo largo de la costa. "Las rieras, actualmente muy canalizadas y con unas cuencas muy urbanizadas, aportan mucho menos sedimentos a la costa y esto representa un déficit para la regeneración natural de las playas", señalan.
El que se está haciendo... no va
Además, la construcción de diques en puertos deportivos también contribuye a que este reparto no se haga de manera regular, quedando la arena retenida al nordeste de los puertos y siendo muy bien inexistente al suroeste. Esto comporta una afectación a la costa, que queda desequilibrada respecto a cómo tendría que ser de anera natural y a partir de la cual se generaron infraestructuras, como por ejemplo la línea ferroviaria que discurre a pocos metros de la playa.
El aviso del Gloria y el rompeolas de Mataró
Ya en enero de 2020, el temporal Gloria afectó algunos tramos de vía, hecho que llevó Adif a hacer trabajos de protección en un tramo de 2 kilómetros entre Mataró y Cabrera de Mar. Es por eso que el colectivo considera que la solución definitiva a este tipo de problemas es trasladar toda la infraestructura en el interior, para dar un servicio "eficiente" a las poblaciones y mejorar la movilidad en la comarca.
Además de garantizar la seguridad de la infraestructura, permitiría abrir los municipios al mar y ampliar la zona de playa, que, un golpe pacificiada la N-II, generaría un amplio paseo marítimo. "Hace falta una visión integral para reordenar nuestro litoral, hace falta voluntad política y hay que tomar decisiones valientes, y todo esto significa adaptación, no solo a los nuevos escenarios de cambio climático, sino a los nuevos escenarios de cambio global", concluye el comunicado.[banner-AMP_5]