Las Agrupaciones de Defensa Forestal (ADF) han denunciado que la carencia de recursos para controlar la plaga de escarabajos 'tomicus' a los bosques de pino del Maresme comportan un aumento del riesgo de incendio. Las ADF del Maresme y Sudeste Vallès Oriental han asegurado que la Diputación de Barcelona ha comunicado a los propietarios que no aportará recursos concretos para combatir esta plaga.
La incidencia de este escarabajo ha ido creciente y esto está provocando el hacinamiento de árboles muertos
El escarabajo 'tomicus' es una especie autóctona que se come el pino por dentro hasta matarlo. Cómo ya explicó el ACN en julio, la incidencia de este escarabajo ha ido creciente y esto está provocando el hacinamiento de árboles muertos. En el Maresme hay 6.600 hectáreas de pinares, de las cuales la mitad están en situación de vulnerabilidad y algunas de ellas ya son irrecuperables. Ante esto, las ADF han alertado que el aumento de madera muerta incrementa el riesgo de incendio forestal y por eso han reclamado los recursos necesarios para parar la plaga. En declaraciones a la ACN, el portavoz de los ADF en el Maresme, Pep Canals, ha asegurado que sí que los habían dicho que habría una partida para combatir esta plaga y ha lamentado que "ahora se han echado atrás". Canals ha añadido que el dinero de que disponen las asociaciones para gestionar los bosques y hacer prevención de incendios para el 2016 marcado al convenio ya se han agotado en algunas zonas y ha reclamado una partida exclusiva para atacar el 'tomicus'.
Petición a la Diputación
En concreto, la Federación de las ADF del Maresme y Sudeste Vallès Oriental han reclamado a la Diputación que prepare un plan de apoyo técnico y económico por el 2017 que permita controlar el 'tomicus' y las otras plagas forestales y retirar la madera muerta. Añaden que de este modo no sólo se reduciría el alto riesgo de incendio forestal sino que también la propagación de las plagas. De no ser así, y en el supuesto de que continúe la carencia de lluvias y el aumento de temperaturas, Canales ha augurado que la situación podría empeorar de cara al próximo verano.
Ha explicado también que las asociaciones están estudiando reunir todos los propietarios de fincas afectadas y valorar si sería viable repartir las tareas entre varias empresas. Aún así, ha dicho que hace falta que la Generalitat y la Diputación afronten parte del coste de estas tareas, puesto que ha recordado que hay pequeños propietarios que no se pueden hacer cargo.