Las protectoras temían que el nuevo centro de animales del Maresme no tuviera la capacidad de acoger los animales perdidos y abandonados de los dieciocho municipios adheridos, sin tener que sacrificar ninguno. Pero antes de la inauguración del centro, que se hará este sábado doia 18, el presidente del Consejo Comarcal, Pere Almera, ha emitido un mensaje de tranquilidad: "Haremos una función complementaria, con más servicios, y en ningún caso tenemos la intención de sacrificar ningún animal". El año pasado las nueve protectoras de la comarca recogieron de las calles más de 600 perros y el Consejo Comarcal, en su nuevo centro, no tiene lugar para más de 200 animales. Este baile de cifras es el que ha preocupando durante las últimas semanas a la Coordinadora de Protectoras de Animales de Cataluña, que temía que los municipios adheridos a la perrera comarcal ya no podrían dirigirse a las protectoras y que, por lo tanto, la sobreocupació del centro del Consejo Comarcal acabara con el sacrificio de animales.
Estos temores han sido desvanecidos por el presidente del Consejo Comarcal del Maresme, Pere Almera, que ha explicado que se podrán asumir todos los abandonos y pérdidas de perros y gatos, puesto que el nuevo centro "no tiene la voluntad de ser una suma de todos los municipios, sino una referencia que realice funciones complementarias a las protectoras y a las que son habituales en un centro de estas características".
Y es que Almera ha destacado que el nuevo centro nace con una filosofía que va más allá de la de un servicio de recogida y atención de los animales. Su principal objetivo será la reintroducción de los animales a los hogares mediante programas de adopción y campañas de sensibilización ciudadana sobre la tenencia responsable de animales.
De momento, dieciocho de los 30 municipios del Maresme Alella, Arenys de Munt, Argentona, Calella, Canet de Mar, Malgrat de Mar, El Masnou, Montgat, Òrrius, Palafolls, Pineda de Mar, Sant Andreu de Llavaneres, Sant Cebrià de Vallalta, Sant Iscle de Vallalta, Sant Vicenç de Montalt, Santa Susanna, Tiana y Tordera ya se han adherido a los servicios del nuevo centro.
Estos temores han sido desvanecidos por el presidente del Consejo Comarcal del Maresme, Pere Almera, que ha explicado que se podrán asumir todos los abandonos y pérdidas de perros y gatos, puesto que el nuevo centro "no tiene la voluntad de ser una suma de todos los municipios, sino una referencia que realice funciones complementarias a las protectoras y a las que son habituales en un centro de estas características".
Y es que Almera ha destacado que el nuevo centro nace con una filosofía que va más allá de la de un servicio de recogida y atención de los animales. Su principal objetivo será la reintroducción de los animales a los hogares mediante programas de adopción y campañas de sensibilización ciudadana sobre la tenencia responsable de animales.
De momento, dieciocho de los 30 municipios del Maresme Alella, Arenys de Munt, Argentona, Calella, Canet de Mar, Malgrat de Mar, El Masnou, Montgat, Òrrius, Palafolls, Pineda de Mar, Sant Andreu de Llavaneres, Sant Cebrià de Vallalta, Sant Iscle de Vallalta, Sant Vicenç de Montalt, Santa Susanna, Tiana y Tordera ya se han adherido a los servicios del nuevo centro.