Técnicos de Gisa y Acesa inician esta semana los trabajos previos a la construcción de uno de los dos pasos sótanos que tienen que servir a los vecinos de Arenys de Mar y de Arenys de Munt para atravesar, a pie, los accesos a la autopista C-32. Esta obra es una vieja reivindicación de los dos municipios, puesto que desde la ampliación de la autopista resulta muy peligroso ir andando de un pueblo al otro. Según explica el alcalde de Arenys de Mar, Ramon Viñas, ya se han resuelto las expropiaciones pendientes para poder empezar la obra y el primer paso que se hará será lo del lado derecho, subiendo desde Arenys de Mar, entre la carretera B-511 y el ramal de entrada a la C-32 en dirección Girona.
El paso inferior tendrá diecinueve metros de longitud y una anchura de tres metros, con escaleras y rampas para superar el desnivel, de forma que permitirá el paso de peatones, personas con movilidad reducida, cochecitos de niños y ciclistas. El proyecto también incluye la construcción de aceras, en un tramo de 800 metros, y la mejora del acceso a la urbanización Aiguaviva desde la C-61, mediante una rotonda.
Viñas ha explicado que las obras no tendrán afectación al tránsito y que sólo habrá que vigilar el paso de según qué vehículos pesados mientras se esté trabajando en el subsuelo. Además, el nudo de accesos a la autopista C-32 en Arenys de Mar y Arenys de Munt está duplicado, de forma que hay dos entradas y salidas en sentido Barcelona y dos en sentido Girona.
Esta situación es, precisamente, motivo de una de las reivindicaciones de los municipios y que, de momento, quedará para resolver. La opción preferida por los Ayuntamientos era la supresión de dos de estos accesos porque hubiera uno en cada sentido y, de este modo, facilitar todavía más el paso a pie entre los dos cascos urbanos.
El paso inferior tendrá diecinueve metros de longitud y una anchura de tres metros, con escaleras y rampas para superar el desnivel, de forma que permitirá el paso de peatones, personas con movilidad reducida, cochecitos de niños y ciclistas. El proyecto también incluye la construcción de aceras, en un tramo de 800 metros, y la mejora del acceso a la urbanización Aiguaviva desde la C-61, mediante una rotonda.
Viñas ha explicado que las obras no tendrán afectación al tránsito y que sólo habrá que vigilar el paso de según qué vehículos pesados mientras se esté trabajando en el subsuelo. Además, el nudo de accesos a la autopista C-32 en Arenys de Mar y Arenys de Munt está duplicado, de forma que hay dos entradas y salidas en sentido Barcelona y dos en sentido Girona.
Esta situación es, precisamente, motivo de una de las reivindicaciones de los municipios y que, de momento, quedará para resolver. La opción preferida por los Ayuntamientos era la supresión de dos de estos accesos porque hubiera uno en cada sentido y, de este modo, facilitar todavía más el paso a pie entre los dos cascos urbanos.