Renfe pedirá una reunión extraordinaria con los Mossos d'Esquadra para evaluar qué nuevas medidas de seguridad se pueden aplicar en ciertas zonas de ocio del Maresme, donde hay discotecas y los jóvenes utilizan el tren como medio de transporte durante la noche y madrugada. La operadora quiere analizar el que pasó domingo a la estación de Pineda de Mar.
Tres vigilantes de seguridad de Renfe resultaron heridos cuando intervinieron en una pelea entre jóvenes poco antes de las siete de la mañana. Dos grupos de personas que volvían de fiesta se enfrentaron y los vigilantes fueron agredidos cuando intentaban separarlos. Los Mozos detuvieron dos jóvenes, uno de 19 y el otro menor de edad, por los delitos de lesiones, amenazas y daños.
No se trata de un caso aislado: en los últimos años se han multiplicado las incidencias, agresiones y actos vandálicos en los trenes, especialmente de madrugada, cuando los usuarios salen de las discotecas maresmenques (con epicentros como Badalona y Montgat, Mataró o el alto Maresme) y se dirigen de vuelta al hogar utilizando la línea R1 que cruza la comarca. Los últimos convoyes de esta línea de la noche de viernes y sábado ya se conocen como "los trenes del botellón" por la gran cantidad de jóvenes que los utilizan para ir a las discotecas de la comarca.