Sabemos que en invierno vienen muchos gastos extras con la Navidad y los regalos, pero es que además invierno es sinónimo de frío y de días cortos y, para hacerle frente, se encienden las calefacciones y se incrementa el uso de luz artificial a los hogares. La subida de enero puede ser complicada si no tienes un plan para afrontar todos los recibos que te llegarán de manera regular. Y por supuesto la factura de la luz llegará con puntualidad cada mes.
Según un informe de Deloitte, la calefacción y el agua caliente sanitaria suponen el consumo energético más relevante de un hogar, en torno al 60-70%. Esto afecta tanto a los bolsillos de los ciudadanos como al cambio climático. Por eso, antes de subir unos grados la calefacción para mantener el hogar más caliente, se tiene que pensar como se puede aislar mejor la casa para evitar que el frío entre.
Te muestramos algunos consejos porque controles tu factura eléctrica y evites que este invierno la calefacción se lleve más dinero de la cuenta.
1. Purga los radiadores de casa
Tal como aconseja Endesa en su web, extraer el aire de los radiadores es conveniente al menos una vez al año, principalmente con la llegada del frío, puesto que estos acumulan burbujas de aire que impiden el paso del calor y, por lo tanto, impiden su transmisión y hacen que aumente el consumo. De este modo tendremos la temperatura deseada y además ahorraremos energía.
Si el que tenemos en casa es una caldera, limpiarla también permitirá ahorrar combustible y producir menos residuos. Este mantenimiento previo antes de que llegue el frío, garantiza seguridad cuando se tenga que utilizar de forma diaria.
2. Tapa los salidos/escapes de calor
Una gran parte de la climatización del hogar se pierde por muros y ventanas, por pequeñas rendijas y grietas a los cuales no damos importancia. Se estima que el aire que se filtra por estos puntos correspondería con una pérdida de calor de hasta el 25%. Por eso, es imprescindible sellar las grietas y vacíos por los cuales pueda entrar el frío.
3. Ajusta la temperatura
El Instituto por la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE) informa que la temperatura ideal para la calefacción en espacios cerrados se sitúa entre 19° y 21° durante el día y entre 15° y 17° durante la noche. Así que para ahorrar es indispensable mantener la temperatura al rango de eficiencia y confort adecuada y no poner la calefacción muy alta.[banner-AMP_5]
Por cada grado que se incrementa la temperatura en una vivienda, el consumo energético aumenta un 7%, el mismo que el gasto en calefacción y en las emisiones de CO₂. Así que ir por casa con camiseta de manga corta y la calefacción alta es una mala idea.
Otro de los grandes mitos es que para preservar el calor a casa y ahorrar energía es mejor tener la calefacción puesta todo el rato y evitar el gasto de apagar y encender. Pero cuando se apaga la calefacción el sistema deja de gastar energía, en cambio, mantener una temperatura fija comporta una aportación continúa de energía; debido a las pérdidas de calor que se producen en muros, techos, ventanas o puertas y que hay que ir compensando.[banner-AMP_6]
4. Ventila la vivienda de forma correcta
Ventila tu hogar durante 10 minutos cada día para no perder energía. Si es posible, aprovecha el momento más solejat del día para abrir todas las ventanas de la casa a la vez. Esto si, los radiadores tienen que estar apagados.
Un hogar correctamente ventilado es fundamental por nuestro confort, puesto que evitas el exceso de humedad y eliminas sustancias contaminantes que pueden ser perjudiciales para la salud. El nivel de humedad relativa más recomendable dentro del hogar oscila entre el 30 y el 50%.[banner-AMP_7]
5. Decora el hogar con una estructura eficiente
Sabías que los muebles absorben el calor? Por eso el consejo de los especialistas de interiorismo es apartar los muebles del radiador, para que el aire caliente pueda circular libremente. El mismo pasa con la ropa extendida, la cual se tiene que apartar del radiador, puesto que, si no se hace, se reduce la eficiencia energética de la calefacción.[banner-AMP_8]
Por otro lado, preparar la decoración de tu hogar por el invierno también puede ser una gran solución. Recuperar las alfombras y cortinas puede ayudar a mantener la escalfor durante el invierno y a mejorar el aislamiento.
Los pequeños gestos diarios pueden suponer un gran cambio. Estos consejos y otros tan conocidos como apagar las luces, no quedarse mucho rato bajo el agua de la ducha o no derrochar con el uso de los electrodomésticos pueden ayudar a hacer que ahorres en la factura de la luz y tengas más cura con el medio ambiente.[banner-AMP_9]