No consigo recordar donde escuché o leer por primera vez la expresión Attitude is everything, la actitud lo es todo. Creo que estuvo en una clase, por parte de un profesor y que la reflexión pertenece al pobre Oscar Wilde. En cualquier caso, la uso mucho, con quién sea que hable, exhaltant la importancia del entusiasmo y la pasión que tendríamos que poner en todo aquello que hacemos. Está claro que la ayuda del entorno y la suerte también cuentan, pero esto lo podemos controlar menos, oi?
También recuerdo haber leído hace unos cuántos años, y en este caso sí puedo citar la fuente, un comentario del periodista y escritor ya traspasado Eduardo Haro Tecglen sobre cómo iba el mundo Él opinaba que indudablemente la evolución era hacia mejor, pero que el hecho que todo se difunda y amplifique en los medios hace ver el vaso no ya medio vacío, sino derramándose inexorablemente. El que más me gustó del comentario aquel es que lo hacía un señor octogenario, que había vivido directa e indirectamente guerras y represiones. Y todavía me va sorpendre más su elogio de la juventut en general, porque los adjetivos más recurrentes acostumbran a ser la pasividad, la apatía y la carencia de compromiso que tienen los menores de treinta y cinco años
Por lo tanto, actitud individual más optimismo.
Es políticamente correcto este discurso con una situación de crisis tan fuerte? Podemos cambiar el que nos rodea con nuestra actitud? Todavía estamos a tiempo para comprometernos? Es fruto todo ello de una gran conspiración? Cada cual se puede contestar a si mismo y pensar qué tipo de control tiene sobre todo aquello que lo rodea. Las noticias y las no-noticias llegan a millones de personas en tiempo real y esto tiene muchísima fuerza social. Es difícil de digerir todo el que vemos y el que pasa en la propia vida, en el entorno cercano y en el mundo.
Cuando salgo veo alguna juventud muy perdida Dan miedo la noche y sus miserias. Pero hay otro escenario con gente que no tiene la parte ecònomica ni laboral establos y, a pesar de esto, fant una tarea de colaboración y solidaridad que no tiene precio. Algún papel habrán jugado la actitud y el compromiso.
También recuerdo haber leído hace unos cuántos años, y en este caso sí puedo citar la fuente, un comentario del periodista y escritor ya traspasado Eduardo Haro Tecglen sobre cómo iba el mundo Él opinaba que indudablemente la evolución era hacia mejor, pero que el hecho que todo se difunda y amplifique en los medios hace ver el vaso no ya medio vacío, sino derramándose inexorablemente. El que más me gustó del comentario aquel es que lo hacía un señor octogenario, que había vivido directa e indirectamente guerras y represiones. Y todavía me va sorpendre más su elogio de la juventut en general, porque los adjetivos más recurrentes acostumbran a ser la pasividad, la apatía y la carencia de compromiso que tienen los menores de treinta y cinco años
Por lo tanto, actitud individual más optimismo.
Es políticamente correcto este discurso con una situación de crisis tan fuerte? Podemos cambiar el que nos rodea con nuestra actitud? Todavía estamos a tiempo para comprometernos? Es fruto todo ello de una gran conspiración? Cada cual se puede contestar a si mismo y pensar qué tipo de control tiene sobre todo aquello que lo rodea. Las noticias y las no-noticias llegan a millones de personas en tiempo real y esto tiene muchísima fuerza social. Es difícil de digerir todo el que vemos y el que pasa en la propia vida, en el entorno cercano y en el mundo.
Cuando salgo veo alguna juventud muy perdida Dan miedo la noche y sus miserias. Pero hay otro escenario con gente que no tiene la parte ecònomica ni laboral establos y, a pesar de esto, fant una tarea de colaboración y solidaridad que no tiene precio. Algún papel habrán jugado la actitud y el compromiso.