Endesa y el Consorcio del Parque de la Cordillera del Litoral han llegado a un acuerdo de colaboración con el objetivo de salvaguardar y proteger las aves rapinyaires que habitan en esta área natural, a caballo de las comarcas del Maresme y el Vallès Oriental. Fruto de este convenio, se han colocado fundas aislantes en el cableado como medida para preservar la avifauna de la zona y también se ha marcado un calendario específico para hacer trabajos de tala y esporga respetando el periodo de reproducción de las especies que habitan o transitan en el parque.
El convenio establece la elaboración de un informe de asesoramiento para la colocación de dispositivos que protejan la avifauna y la colocación de estos en aquellos lugares oportunos, así como el estudio de dispositivos dissuassoris que simulen las aves rapinyaires para evitar que estas repongan en torres de alta tensión. Además, el vínculo también incluye la coordinación de los periodos de tala y esporga de la demasiada forestal que se encuentra en el área de influencia de las líneas eléctricas con la reproducción de las aves rapinyaires, así como la gestión de candados y cierre de pistas.
Una de las actuaciones que ya se han llevado a cabo es la instalación de dispositivos de seguridad al cableado, de forma que se reduce el riesgo de accidentes por electrocución o colisión de la avifauna de especies, como por ejemplo el águila marcenca.
Esta iniciativa se ha llevado a cabo en tres torres metálicas cercanas a un sector de nidificación y se está trabajando al colocar también fundas aislantes elaboradas con polímero -un material similar a la silicona- a otra línea que atraviesa el parque. Estos envoltorios disminuyen el riesgo eléctrico en el momento en que una ave que repone en una torre levanta el vuelo, puesto que al extender las alas podría haber contacto con un cable podría producirse un arco eléctrico y la consecuente descarga.
Así mismo, y desde el 2010, Endesa -con la colaboración del Parque de la Cordillera Litoral- planifica los trabajos forestales de tala y esporga de la demasiada forestal que crece alrededor de las líneas eléctricas que discurren por el el espacio natural en función de los periodos de reproducción del águila marcenca y del resto de especies de rapinyaires. Así, se ha marcado un calendario respetuoso con la reproducción de las aves para hacer compatible la conservación de la avifauna con la prevención de incendios forestales al territorio.
En este sentido, la adecuación de la línea se ha hecho antes de que llegue el águila marcenca, la cual acostumbra a migrar en Cataluña, procedente de la África subsahariana, hacia el mes de marzo. A principios de los años 80 la población de esta especie a las comarcas del Maresme y el Vallès Oriental era muy reducida hasta el punto que se consideraba en peligro de extinción.
Ahora, pero, se encuentra en expansión y no sólo a este lugar, sino a prácticamente todo Cataluña. Este año ha sido lo mejor año del seguimiento en en cuanto a éxito reproductor según un estudio elaborado por el Parque de la Cordillera Litoral. Es por este motivo que, como prevención, la compañía eléctrica ha tomado esta iniciativa de acuerdo con la política medioambiental en la protección de la diversidad. Entre el 1960 y el 2011, sólo teniendo en cuenta el grupo de rapinyaires diurnas, el consorcio tiene constancia de 28 especies diferentes.
El convenio establece la elaboración de un informe de asesoramiento para la colocación de dispositivos que protejan la avifauna y la colocación de estos en aquellos lugares oportunos, así como el estudio de dispositivos dissuassoris que simulen las aves rapinyaires para evitar que estas repongan en torres de alta tensión. Además, el vínculo también incluye la coordinación de los periodos de tala y esporga de la demasiada forestal que se encuentra en el área de influencia de las líneas eléctricas con la reproducción de las aves rapinyaires, así como la gestión de candados y cierre de pistas.
Una de las actuaciones que ya se han llevado a cabo es la instalación de dispositivos de seguridad al cableado, de forma que se reduce el riesgo de accidentes por electrocución o colisión de la avifauna de especies, como por ejemplo el águila marcenca.
Esta iniciativa se ha llevado a cabo en tres torres metálicas cercanas a un sector de nidificación y se está trabajando al colocar también fundas aislantes elaboradas con polímero -un material similar a la silicona- a otra línea que atraviesa el parque. Estos envoltorios disminuyen el riesgo eléctrico en el momento en que una ave que repone en una torre levanta el vuelo, puesto que al extender las alas podría haber contacto con un cable podría producirse un arco eléctrico y la consecuente descarga.
Así mismo, y desde el 2010, Endesa -con la colaboración del Parque de la Cordillera Litoral- planifica los trabajos forestales de tala y esporga de la demasiada forestal que crece alrededor de las líneas eléctricas que discurren por el el espacio natural en función de los periodos de reproducción del águila marcenca y del resto de especies de rapinyaires. Así, se ha marcado un calendario respetuoso con la reproducción de las aves para hacer compatible la conservación de la avifauna con la prevención de incendios forestales al territorio.
En este sentido, la adecuación de la línea se ha hecho antes de que llegue el águila marcenca, la cual acostumbra a migrar en Cataluña, procedente de la África subsahariana, hacia el mes de marzo. A principios de los años 80 la población de esta especie a las comarcas del Maresme y el Vallès Oriental era muy reducida hasta el punto que se consideraba en peligro de extinción.
Ahora, pero, se encuentra en expansión y no sólo a este lugar, sino a prácticamente todo Cataluña. Este año ha sido lo mejor año del seguimiento en en cuanto a éxito reproductor según un estudio elaborado por el Parque de la Cordillera Litoral. Es por este motivo que, como prevención, la compañía eléctrica ha tomado esta iniciativa de acuerdo con la política medioambiental en la protección de la diversidad. Entre el 1960 y el 2011, sólo teniendo en cuenta el grupo de rapinyaires diurnas, el consorcio tiene constancia de 28 especies diferentes.