Para Albert Espinosa, el cine y el teatro tienen una misión social: mostrar la realidad tal como es y reflejar los problemas que tienen los espectadores a la vida real de una manera verídica, huyendo de los tópicos. Una concepción que Espinosa, que combina el teatro con los guiones para cine y televisión, ha plasmado en films de gran éxito como Planta cuarta o Tú vida en 65', y que lo trajo el pasado viernes día 2 a inaugurar la primera Muestra de Arte Social de Mataró.
Espinosa ofreció una conferencia en el aula de Teatro, en qué explicó principalmente como la experiencia de haber sufrido cáncer (estuvo ingresado en un hospital entre los 14 y los 24 años y debido a la enfermedad perdió una pierna, un pulmón y medio hígado) lo ha condicionado como creador. Las películas que tratan el cáncer siempre muestran dolor, sufrimiento, cabes pelados, vómitos constantes, morfina... Pero durante mi proceso, a pesar de todo, yo conseguí ser feliz, dijo Espinosa. El guionista se queja de que tanto el cine como el teatro te meten el miedo cuando hablan de esta enfermedad. Esto es muy negativo, porque mucha gente llega a concebir la vida según el qué ve a las películas.
Espinosa otorga tanto al cine cómo al teatro una gran influencia en la conducta y la manera de pensar de las personas; por este motivo, cuando escribe una película o una obra de teatro, lo hace con el objetivo de erradicar los tópicos. El guion de Planta cuarta es el mejor ejemplo. El film, dirigido por Antonio Mercero y protagonizado por Juan José Ballesta, narra las peripecias de tres chicos internados al hospital, enfermos de cáncer de huesos. La vida de los tres protagonistas, pero, se aleja de la angustia constante y está llena de trapelleries por el hospital, escapadas, entrenamientos de baloncesto y jornadas tomando el solo. Hay gente que después de ver la película me ha asegurado que ya no tenía tanto miedo al cáncer, dijo Espinosa. Según él, Planta cuarta no edulcora la realidad, simplemente la muestra tal como es, basándose en la experiencia del propio guionista, sin caer en el tópico de tratar el cáncer como un drama absoluto e irreversible.
Romper barreras
La obsesión de Espinosa es romper barreras y huir de visiones interesadas y distorsionadas de ciertos colectivos. Así lo ha dejado patente en películas como Va a ser que nadie se perfecto, donde los tres protagonistas son un ciego, un sordo y un cojo, Tú vida en 65', que trata el tema de la muerte, o la comedia teatral No me pidas que te beso porque te besaré, que refleja el mundo de las personas con discapacitado. Según Espinosa, cuando estos tipos de personajes aparecen a las por ellícules, nunca lo hacen como un protagonista más, sino porque el guion, la trama, exigen la aparición de alguien con este problema.
Espinosa ofreció una conferencia en el aula de Teatro, en qué explicó principalmente como la experiencia de haber sufrido cáncer (estuvo ingresado en un hospital entre los 14 y los 24 años y debido a la enfermedad perdió una pierna, un pulmón y medio hígado) lo ha condicionado como creador. Las películas que tratan el cáncer siempre muestran dolor, sufrimiento, cabes pelados, vómitos constantes, morfina... Pero durante mi proceso, a pesar de todo, yo conseguí ser feliz, dijo Espinosa. El guionista se queja de que tanto el cine como el teatro te meten el miedo cuando hablan de esta enfermedad. Esto es muy negativo, porque mucha gente llega a concebir la vida según el qué ve a las películas.
Espinosa otorga tanto al cine cómo al teatro una gran influencia en la conducta y la manera de pensar de las personas; por este motivo, cuando escribe una película o una obra de teatro, lo hace con el objetivo de erradicar los tópicos. El guion de Planta cuarta es el mejor ejemplo. El film, dirigido por Antonio Mercero y protagonizado por Juan José Ballesta, narra las peripecias de tres chicos internados al hospital, enfermos de cáncer de huesos. La vida de los tres protagonistas, pero, se aleja de la angustia constante y está llena de trapelleries por el hospital, escapadas, entrenamientos de baloncesto y jornadas tomando el solo. Hay gente que después de ver la película me ha asegurado que ya no tenía tanto miedo al cáncer, dijo Espinosa. Según él, Planta cuarta no edulcora la realidad, simplemente la muestra tal como es, basándose en la experiencia del propio guionista, sin caer en el tópico de tratar el cáncer como un drama absoluto e irreversible.
Romper barreras
La obsesión de Espinosa es romper barreras y huir de visiones interesadas y distorsionadas de ciertos colectivos. Así lo ha dejado patente en películas como Va a ser que nadie se perfecto, donde los tres protagonistas son un ciego, un sordo y un cojo, Tú vida en 65', que trata el tema de la muerte, o la comedia teatral No me pidas que te beso porque te besaré, que refleja el mundo de las personas con discapacitado. Según Espinosa, cuando estos tipos de personajes aparecen a las por ellícules, nunca lo hacen como un protagonista más, sino porque el guion, la trama, exigen la aparición de alguien con este problema.