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La brigada trabaja en el espacio público de la ciudad. Foto: R. Gallofré

Redacció

Anuario 2020: las lecciones del espacio público

La conversión de sectores en nuevos espacios para peatones choca con problemas mientras se degrada el estado de la via pública

El espacio público, entendido como las calles y las plazas que comparte en su uso la ciudadanía en el día a día, también está en un momento de crisis y cambios en el tráfico de este 2020, por más que venga de tiempo atrás y sea una apuesta de recorrido. Por un lado, hay la apuesta urbanística compartida a nivel mundial por ciudades más amables, transitables a pie o en bicicleta, más verdes y donde el coche pierde protagonismo en favor del peatón. De la otra hay el propio concepto del espacio urbano como algo compartido y que por lo tanto hay que tener cura entre toda la ciudadanía. Un ámbito, este último, en el que a Mataró ha estado notorio y fehaciente un retroceso o paultatina degradación del estado del espacio público, fruto del incivismo puntual pero también de una cierta dejadez o poco mantenimiento.

Una parte importante de este relleno tiene que ver con los propios servicios de limpieza y recogida de la basura que en la ciudad ya entró en crisis el 2019 con la extinción del antiguo contrato y que este 2020 ha presentado como novedades por un lado el importante dispositivo especial de limpieza y desinfección de espacios, áreas de contenedores o equipaciones para prevenir el contagio de Covid-19 y del otro la carta a los Reyes llena de buenas intenciones que es el nuevo pliego con el que a inicios de 2021 se tiene que licitar el nuevo contrato.

Cómo acaba siendo el servicio y si mejora la percepción de pulcritud de la ciudad con el nuevo adjudicatario sí que es materia del anuario 2021. A pesar de que el que ya se ha aprobado (porque es una tasa dependiente de este nuevo contrato) es una importante subida del precio ciudadano que se paga por el servicio de la basura, que sube un 17,5% en un momento de ahogo de las economías domésticas.

1. Hace falta mantenimiento y civismo

Por qué el espacio público está dejado o directamente degradado en la ciudad de Mataró, en muchos casos? Pues por acción y omisión, podría decirse. Por acción de la gente que es incívica y no cuida el que es de todo el mundo, sea por vandalismo o mal uso de espacios o equipaciones. Por acción, en algunos casos también, de fenómenos perturbadores como el mismo Gloria u otras abanicadas y temporales. Pero también por omisión. La dejadez denota que la acción sobre el espacio público no está siendo basta efectiva. Falta mantenimiento y margen de intervención sobre desperfectos puntuales por más que desde el Gobierno se niegue la mayor y se atribuya a Gloria y el confinamiento el atraso de la posta a punto de la ciudad.
 

El tancament de la Riera de Mataró al trànsit fa aigües. Foto: Jordi Pujolar



2. Consta transformar espacios concretos

La apuesta por una ciudad más verde y amable con el peatón, que apueste por el transporte rodado (en bicicleta o patinete) y mire de limitar la movilidad en coche ha hecho un salto cualitativo adelante en un 2020 en que se han empezado a implementar desde carriles bici en espacios como las rondas a ampliaciones provisionales de aceras. Una de las apuestas estrella tenía que ser el cierre al tráfico rodado de la Riera que se ha intentando implementar en tres tongades, siendo falladas las dos primeras con no poca polémica, puesto que el Centro ha seguido con coches fuera de horario y la regidora Nuria Moreno llegó a atribuirlo a la “mala suerte” de tener las pilones averiadas.
 

El Camí Ral actual, i recreació de com quedarà en el futur. Foto: R. Gallofré. / Ajuntament



3. Los nuevos sectores en boga

El espacio urbano está en transformación y es en determinadas zonas de Mataró donde se nota más este cambio de fisonomía. son ejemplos dentro del Camino real, que ha aprobado un nuevo planeamiento urbanístico y que quiere ser la arteria potente que conecte el distrito TecnoCampus y el Centro o la Ringlera, donde se sigue desarrollando todo el sector. Al lado opuesto de la ciudad, 2020 también lega una declaración importante con la cual el Ayuntamiento se hace sede el discurso y la tarea de la Asociación de las Cinco Norias y se propone de revalorizar, potenciar e incentivar todo el espacio agrario de la ciudad (más de un tercio del término municipal) como un gran activo de servicio a toda la ciudadanía desde el punto de vista ambiental, paisajístico o agrícola.