"Esto que os enseño es el sexto invitado en esta mesa redonda". Dentro de una cubeta se veían dos ejemplares de escarbat morrut rojo, una plaga que ya ha llegado a Mataró y que ha infectado unas 300 palmeras en todo Cataluña. Con este golpe de efecto, el alcalde de Mataró y diputado del área de Medio ambiente de la Diputación de Barcelona, Joan Antoni Baron ha sorprendido los ponentes y la audiencia de la mesa redonda "Ciudad Verde en la Planificación Estratégica Municipal", en la cual ha participado este miércoles por la mañana en el sí del 2n Congreso Europeo "Ciutat Verde", celebrado durante los días 23 y 24 de octubre al Colegio de Arquitectos de Cataluña.
Acompañado de los regidores de Medio ambiente de Reos y Figueres, Ernest París y Richard Elelman respectivamente, Baron ha expuesto las características de Mataró, estructurada, ha dicho en cuatro cuartos: "una zona forestal, un espacio agrícola protegido, un casco urbano apretujado –característico de los municipios mediterráneos- y el mar, con un valor añadido cómo es la posidonia". Partiendo de esta reflexión, el alcalde ha defendido una gestión de los espacios verdes en común con otros municipios vecinos, y no exclusivos. A la vez, ha destacado la importancia de las rieras y torrentes como conexiones interurbanas, abandonando el viejo concepto "de espacios abandonados".
El alcalde de Mataró ha elogiado el paisaje del Maresme, característico por la presencia de alzinars y pinares, y ha hecho autocrítica por qué según ha dicho "no se ha sabido explicar bastante bien". Según el alcalde "se tiene que hacer entender que nuestros paisajes también sueño bonitos. Aquí no tenemos llanuras verdes como al norte de Europa, pero tenemos que saber defender el que es nuestro".
Acompañado de los regidores de Medio ambiente de Reos y Figueres, Ernest París y Richard Elelman respectivamente, Baron ha expuesto las características de Mataró, estructurada, ha dicho en cuatro cuartos: "una zona forestal, un espacio agrícola protegido, un casco urbano apretujado –característico de los municipios mediterráneos- y el mar, con un valor añadido cómo es la posidonia". Partiendo de esta reflexión, el alcalde ha defendido una gestión de los espacios verdes en común con otros municipios vecinos, y no exclusivos. A la vez, ha destacado la importancia de las rieras y torrentes como conexiones interurbanas, abandonando el viejo concepto "de espacios abandonados".
El alcalde de Mataró ha elogiado el paisaje del Maresme, característico por la presencia de alzinars y pinares, y ha hecho autocrítica por qué según ha dicho "no se ha sabido explicar bastante bien". Según el alcalde "se tiene que hacer entender que nuestros paisajes también sueño bonitos. Aquí no tenemos llanuras verdes como al norte de Europa, pero tenemos que saber defender el que es nuestro".