El alcalde de Mataró, el socialista David Boto, ha estado en el centro de la polémica en las últimas semanas porque ha decidido que el Ayuntamiento no colabore con el Referéndum del 1 de octubre, que considera "ilegal". Lo ha hecho en contra del mandato del Pleno municipal, de mayoría soberanista, y a pesar de gobernar la ciudad con CiU. Pero Boto se ha descolgado este viernes con un mensaje a su perfil de Facebook donde asegura que "Como demócrata y como ciudadano estoy convencido que la crisis que sufrimos se tiene que resolver votante".
Boto no permitirá que el Ayuntamiento de Mataró apoye al referéndum del 1 de octubre, pero sí que defiende que los catalanes acaben votando "con todas las garantías"
"Tenemos que tomar la palabra sobre nuestro futuro" afirma Boto, en su escrito dirigido al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy. Aún así, el alcalde del PSC asegura que el referéndum necesario no es el de este 1 de octubre. "Yo quiero hacerlo con todas las de la ley y con todas las garantías. Y entonces, mi voto será por una Cataluña rica y llena, en una España plural y abierta y en una Europa de paz y progreso", afirma el alcalde. En su escrito, Boto remacha: "Yo no soy independentista. Me considero un ciudadano libre; me siento catalán, me siento español y me siento de Mataró".
En su texto, Boto parece apostar claramente por un Referéndum pactado con el Estado como vía de salida al actual conflicto político. Algo que va más allá del propuesto hecho por su partido a nivel catalán. El primer secretario del PSC, Miquel Iceta, ha defendido esta misma semana que la única vía es que "Cataluña gane en autogobierno y financiación, y que España se transforme en un Estado federal". "El pacto que proponemos tendría que culminar en una reforma constitucional federal que fuera sometida al voto de la ciudadanía", añadió Iceta.