CaboSanRoque son uno los grupos musicales más peculiares del momento. Toman el nombre de un viejo transatlántico, y crean su música a partir de instrumentos inventados, que surgen del reciclaje de objetos cotidianos. Lavadoras, scalèxtrics, grapadoras, máquinas de coser y otros mobiliarios que pierden su función original y se convierten en máquinas musicales. El estudio de las capacidades expresivas musicales y escénicas de instrumentos mecánicos automáticos, combinados con intérpretes humanos, es el hilo conductor de su trabajo, gracias al cual han presentado propuestas como 'Música a máquina' o La Caixeta.
Su último espectáculo trae por título Turno por la noche, y se podrá ver este viernes, día 10, al Teatro Monumental. El proceso de creación de Turno por la noche se inició en 2008, cuando el grupo tuvo noticia del desmontaje de una línea de producción de una fábrica de galletas. CaboSanRoque aprovecharon buena parte de las máquinas de la fábrica para construir una orquesta mecánica, que incluye sección de vientos, cuerdas y percusión, a partir de pistones, válvulas, motores y cintas transportadores. Elementos que se pasaron 25 años produciendo galletas y que ahora han pasado a producir músicas. El "concierto" que surge pone de manifiesto el mundo repetitivo, funcional y aséptico de la línea de producción de una fábrica, y transporta el espectador a la cabeza de un operario que pasa las horas repitiendo los mismos movimientos ante una máquina. Los miembros de CaboSanRoque se pasaron cerca de un año para reconvertir todos estos trastos en una orquesta.
Dos horas antes de presentar el espectáculo, los músicos de CaboSanRoque serán al Monumental para hablar con los espectadores sobre los secretos de 'Turno por la noche'.
Su último espectáculo trae por título Turno por la noche, y se podrá ver este viernes, día 10, al Teatro Monumental. El proceso de creación de Turno por la noche se inició en 2008, cuando el grupo tuvo noticia del desmontaje de una línea de producción de una fábrica de galletas. CaboSanRoque aprovecharon buena parte de las máquinas de la fábrica para construir una orquesta mecánica, que incluye sección de vientos, cuerdas y percusión, a partir de pistones, válvulas, motores y cintas transportadores. Elementos que se pasaron 25 años produciendo galletas y que ahora han pasado a producir músicas. El "concierto" que surge pone de manifiesto el mundo repetitivo, funcional y aséptico de la línea de producción de una fábrica, y transporta el espectador a la cabeza de un operario que pasa las horas repitiendo los mismos movimientos ante una máquina. Los miembros de CaboSanRoque se pasaron cerca de un año para reconvertir todos estos trastos en una orquesta.
Dos horas antes de presentar el espectáculo, los músicos de CaboSanRoque serán al Monumental para hablar con los espectadores sobre los secretos de 'Turno por la noche'.