Ampliar las líneas de ayuda a la creación musical es el principal reto que se ha marcado la Casa de la Música Popular (CMP) de Mataró a partir de este 2009. El organismo, participado por Visual Sonora (la empresa que gestiona el Clap), el IMAC y el Instituto Catalán de Industrias Culturales de la Generalitat cumple este año su cuarto aniversario y quiere usar la efeméride como trampolín para hacer un salto adelante definitivo. El modelo de Casa de la Música ya se ha consolidado en la ciudad y a todo el territorio catalán, hasta el punto de liderar la creación de una red de centros similares a cuatro ciudades más de Cataluña. Pero el IMAC y Visual Sonora han detectado carencias. "Todavía no se ha potenciado bastante el papel de apoyo a la creación musical", dijo el regidor de Cultura, Sergi Penedès, en la rueda de prensa del cuarto aniversario de la entidad. Y este será el principal frente de actuación de sus responsables a partir de ahora.
Las principales novedades en este sentido son dos: la puesta en marcha de talleres de autoenregistrament, porque los grupos o músicos en solitario puedan grabar canciones a casa suya (una opción que cada vez toman más conjuntos puesto que el material necesario es cada día más accesible económicamente y requiere de menos espacio); y la creación de becas por la grabación de maquetas, una iniciativa en la cual colabora el colectivo mataroní La Llama. A esto se suma proyectos ya existentes que se potenciarán como los talleres y masterclass de instrumentos y de tecnología musical, o los Banco de Pruebas, que ofrecen el escenario del Clap a grupos noveles porque muestren su talento. La sala también ofrece "stages" a grupos consolidados y de reciente creación porque ensayen el directo. A la vegada, piensan ofrecer jornadas de asesoramiento porque los grupos se informen sobre cuestiones como los derechos de autor o la promoción a través de Internet. Todo ello quiere incidir en la línea que ya mantiene la IMAC de ayudas en sectores como las artes escénicas. "Nuestro objetivo tiene que ser apoyar a la creación", resumió Penedès.
Los nuevos proyectos, pero, no se acaban aquí. En el ámbito de formación musical a las escuelas, Casa de la Música impulsará el "Músiquetes a la Mece", una iniciativa destinada a las escuelas de primaria para hacer un trabajo pedagógico recuperando el cançoner clásico infantil de los Países Catalanes. Y por los del secundaria, potenciarán un concurso literario de interpretación de hip hop, utilizando este género como reclamo porque los estudiantes de catalán, castellano o inglés se interesen por las estructuras lingüísticas, la métrica o el vocabulario. También se ampliará la colaboración con entidades de la ciudad y la presencia de CMP a la calle, con tastets de instrumentos y la creación de una nueva formación musical numerosa que se añadirá al corazón Gospel Sueños y a la Big Band Jazz Maresme. Se trata de una fanfarria (conjunto de viento y metal especialista en desfiles y actas de calle) que se estrenará probablemente el próximo verano en la ciudad.
"Han sido cuatro años muy intensos, un sueño hecho realidad", afirmó Jordi Herreruela, director del proyecto de Casa de la Música Popular. Una iniciativa surgida en Mataró en 2005 y que se ha extès en cuatro ciudades más (Salt, Hospitalet, Manresa y Terrassa) auspiciada por la Generalitat como proyecto de país. Hay más municipios interesados, a pesar de que Herreruela aseguró que este 2009 no se ampliará la red puesto que primero quieren consolidar la relación y los proyectos en común entre las cinco ciudades que forman parte.
Las principales novedades en este sentido son dos: la puesta en marcha de talleres de autoenregistrament, porque los grupos o músicos en solitario puedan grabar canciones a casa suya (una opción que cada vez toman más conjuntos puesto que el material necesario es cada día más accesible económicamente y requiere de menos espacio); y la creación de becas por la grabación de maquetas, una iniciativa en la cual colabora el colectivo mataroní La Llama. A esto se suma proyectos ya existentes que se potenciarán como los talleres y masterclass de instrumentos y de tecnología musical, o los Banco de Pruebas, que ofrecen el escenario del Clap a grupos noveles porque muestren su talento. La sala también ofrece "stages" a grupos consolidados y de reciente creación porque ensayen el directo. A la vegada, piensan ofrecer jornadas de asesoramiento porque los grupos se informen sobre cuestiones como los derechos de autor o la promoción a través de Internet. Todo ello quiere incidir en la línea que ya mantiene la IMAC de ayudas en sectores como las artes escénicas. "Nuestro objetivo tiene que ser apoyar a la creación", resumió Penedès.
Los nuevos proyectos, pero, no se acaban aquí. En el ámbito de formación musical a las escuelas, Casa de la Música impulsará el "Músiquetes a la Mece", una iniciativa destinada a las escuelas de primaria para hacer un trabajo pedagógico recuperando el cançoner clásico infantil de los Países Catalanes. Y por los del secundaria, potenciarán un concurso literario de interpretación de hip hop, utilizando este género como reclamo porque los estudiantes de catalán, castellano o inglés se interesen por las estructuras lingüísticas, la métrica o el vocabulario. También se ampliará la colaboración con entidades de la ciudad y la presencia de CMP a la calle, con tastets de instrumentos y la creación de una nueva formación musical numerosa que se añadirá al corazón Gospel Sueños y a la Big Band Jazz Maresme. Se trata de una fanfarria (conjunto de viento y metal especialista en desfiles y actas de calle) que se estrenará probablemente el próximo verano en la ciudad.
"Han sido cuatro años muy intensos, un sueño hecho realidad", afirmó Jordi Herreruela, director del proyecto de Casa de la Música Popular. Una iniciativa surgida en Mataró en 2005 y que se ha extès en cuatro ciudades más (Salt, Hospitalet, Manresa y Terrassa) auspiciada por la Generalitat como proyecto de país. Hay más municipios interesados, a pesar de que Herreruela aseguró que este 2009 no se ampliará la red puesto que primero quieren consolidar la relación y los proyectos en común entre las cinco ciudades que forman parte.