Cómo anteriormente dije soy andaluza y soy cordobesa, por eso quizás sea este el artículo el que hago con más ilusión, pero también el que más trabajo me ha costado porque me gustaría que todo el mundo que lo lea, sienta el que se estando en Córdoba en mayo. Cómo que sé que es complicado, he intentado hacer una aproximación. El mes de mayo cordobés empieza con las Cruces de Mayo, fiesta de origen religioso que se celebra los primeros días de mes. Las cruces, símbolo del cristianismo, están adornadas en su totalidad por flores bien naturales o artesanales, las calles y plazas se adornan también de flores y testos alrededor de la cruz, actualmente se acompaña de una barra que suministra bebida y comer típico de Córdoba y música como rumbas y sevillanas.
Al finalizar las cruces, Córdoba sigue de fiesta, ahora los toca en los patios cordobeses, que empieza el día 5 y acaba el día 15 de mayo. La singularidad de los patios cordobeses es única al mundo. Córdoba se vuelca en suyos patios es la combinación de pozos y fuentes antiguas adornados por testos de geranios, gitanillas, jazmines mezcla de olor y color, blancas paredes adornadas con flores y platos de patimetres de alto y se montan en plazas y calles habitualmente antiguo. La persona que tiene la suerte de entrar en un patio cordobés tiene la sensación que ha entrado en otro mundo, un mundo donde el agua que cae de la fuente junto al olor y color de las flores te rodea sinceramente es único. Y si además cuando sales tienes suerte y te encuentras con la tuna, da por hecho que el día ha sido completo.
Continuando con el mes de mayo en Córdoba a los patios le sigue la feria, que se celebra las dos últimas semanas de mayo en honor a la Virgen María de la Salud. Es de carácter abierto y popular se celebra junto al río Guadalquivir al recinto del Arenal. A nivel personal el que más me gusta de la feria es la portada, en 2005 se inauguró la actual portada que pasa para ser la mayor de Andalucía con 140 metros de ancho y 45 metros de alto recreando con miles de bombillas de los arcos de la mezquita. La iluminación de la portada junto con los fuegos artificiales es el inicio oficial de la feria, la cual se compone de centenares de casetas casi todas abiertas a todos los públicos, hay muy poca privatización el que da lugar a que todo el que vaya pueda disfrutar de una gran feria, las casetas están adornadas con fanalets y espumillones sirviendo la comida típica como flamenquins, salmorejo, tortilla de patatas ect y bebidas como el vino Montilla-Moriles, cerveza, refrescos y el gran reclamo de toda feria el famoso rebujito. La música es principalmente desevillanes y rumbas pero también se está poniendo mucho moda las discocasetas los tiempos cambian y hay que cambiar con los tiempos. El más bonito que puede tener una feria es a sus mujeres vestidas de flamencas, cierto es que cada vez vemos menos el vestido típico de cordobesa, igual que casi ningún hombre usa el sombrero cordobés, salvo los cavallistes que siguen haciendo uso de él, ya finalmente recordar la calle del infierno maravillosa para los niños y un tormento para los padres, pues si, la calle del infierno es la calle de las atracciones que cuenta con unas 350 atracciones combinándose con los famosos lugares de comer rápido churros y bares ambulantes, sólo me falta decir que Córdoba es bonita siempre pero en mayo es maravillosa.
Al finalizar las cruces, Córdoba sigue de fiesta, ahora los toca en los patios cordobeses, que empieza el día 5 y acaba el día 15 de mayo. La singularidad de los patios cordobeses es única al mundo. Córdoba se vuelca en suyos patios es la combinación de pozos y fuentes antiguas adornados por testos de geranios, gitanillas, jazmines mezcla de olor y color, blancas paredes adornadas con flores y platos de patimetres de alto y se montan en plazas y calles habitualmente antiguo. La persona que tiene la suerte de entrar en un patio cordobés tiene la sensación que ha entrado en otro mundo, un mundo donde el agua que cae de la fuente junto al olor y color de las flores te rodea sinceramente es único. Y si además cuando sales tienes suerte y te encuentras con la tuna, da por hecho que el día ha sido completo.
Continuando con el mes de mayo en Córdoba a los patios le sigue la feria, que se celebra las dos últimas semanas de mayo en honor a la Virgen María de la Salud. Es de carácter abierto y popular se celebra junto al río Guadalquivir al recinto del Arenal. A nivel personal el que más me gusta de la feria es la portada, en 2005 se inauguró la actual portada que pasa para ser la mayor de Andalucía con 140 metros de ancho y 45 metros de alto recreando con miles de bombillas de los arcos de la mezquita. La iluminación de la portada junto con los fuegos artificiales es el inicio oficial de la feria, la cual se compone de centenares de casetas casi todas abiertas a todos los públicos, hay muy poca privatización el que da lugar a que todo el que vaya pueda disfrutar de una gran feria, las casetas están adornadas con fanalets y espumillones sirviendo la comida típica como flamenquins, salmorejo, tortilla de patatas ect y bebidas como el vino Montilla-Moriles, cerveza, refrescos y el gran reclamo de toda feria el famoso rebujito. La música es principalmente desevillanes y rumbas pero también se está poniendo mucho moda las discocasetas los tiempos cambian y hay que cambiar con los tiempos. El más bonito que puede tener una feria es a sus mujeres vestidas de flamencas, cierto es que cada vez vemos menos el vestido típico de cordobesa, igual que casi ningún hombre usa el sombrero cordobés, salvo los cavallistes que siguen haciendo uso de él, ya finalmente recordar la calle del infierno maravillosa para los niños y un tormento para los padres, pues si, la calle del infierno es la calle de las atracciones que cuenta con unas 350 atracciones combinándose con los famosos lugares de comer rápido churros y bares ambulantes, sólo me falta decir que Córdoba es bonita siempre pero en mayo es maravillosa.