Entre Altafulla y Tarragona (el Tarragonès), tocando el mar, se levanta sobre un acantilado el Castillo medieval de Tamarit. Todo y la belleza de esta construcción medieval a pie del Mediterráneo, hoy convertida en lugar de celebraciones de grandes banquetes y casamientos, no nos quedaremos aquí. Este es sólo el punto de partida de una corta y agradable excursión por esta parte de la costa tarraconense. Andando siempre borde el mar llegaremos hasta la cala Tamarit, donde podremos descansar, recuperar fuerzas y, si hace buen tiempo y calor, bañarnos.
El castillo de Tamarit tuvo un papel importante en la defensa de los condados catalanes ante la invasión musulmana al siglo XI. Sus jardines llegan casi hasta el mar y, si se tiene la oportunidad de pasear por ellos, se pueden ver todavía restos románicos importantes. La excursión, de una hora de duración, empieza justo en este punto, donde se llega por la N-340, dirección a la Mora, urbanización situada entre Tarragona y Altafulla. Después de dar un tumbo por los alrededores del castillo, ya podemos empezar a andar por el camino que resegueix el litoral, dirección a ponente, hacia la Punta de la Mora, incluida en el Plan de espacios de interés natural.
El camino borde el mar da a una pista de la urbanización que recibe el nombre de esta punta y después se adentra en medio del bosque de la Marquesa hasta que se llega, finalmente, a la Punta de la Mora, detrás de la cual encontramos la cala Tamarit. Aquí tenemos dos opciones: subir directamente al mirador desde Punta de la Mora para disfrutar de una panorámica de cala Tamarit o bajar primero a la playa para descansar y comer y dejar el mirador por el retorno.
El castillo de Tamarit tuvo un papel importante en la defensa de los condados catalanes ante la invasión musulmana al siglo XI. Sus jardines llegan casi hasta el mar y, si se tiene la oportunidad de pasear por ellos, se pueden ver todavía restos románicos importantes. La excursión, de una hora de duración, empieza justo en este punto, donde se llega por la N-340, dirección a la Mora, urbanización situada entre Tarragona y Altafulla. Después de dar un tumbo por los alrededores del castillo, ya podemos empezar a andar por el camino que resegueix el litoral, dirección a ponente, hacia la Punta de la Mora, incluida en el Plan de espacios de interés natural.
El camino borde el mar da a una pista de la urbanización que recibe el nombre de esta punta y después se adentra en medio del bosque de la Marquesa hasta que se llega, finalmente, a la Punta de la Mora, detrás de la cual encontramos la cala Tamarit. Aquí tenemos dos opciones: subir directamente al mirador desde Punta de la Mora para disfrutar de una panorámica de cala Tamarit o bajar primero a la playa para descansar y comer y dejar el mirador por el retorno.