La Sociedad Protectora de Animales de Mataró se encuentra en una situación delicada. El crecimiento excesivo a todos niveles (personal, centros, proyectos) y la crisis económica galopando que se ha sufrido a todos niveles, pero sobre todo también en los entes públicos, han hecho un mal pase a una entidad sin ánimo de lucro que, como bien indica su presidenta Silvia Serra, dependía en exceso de las administraciones públicas. Sólo los ha quedado un camino: el de reestructurarse y ajustar los costes a la realidad que los ha tocado vivir, que no es ninguna otra que menos ingresos y una deuda enorme para pagar. A pesar de todas las dificultades, que la Sociedad Protectora de Animales continúe adelante y tenga previsiones de poder ensortir-se durando el 2013 es una buena noticia. La función que hacen es vital, más todavía en tiempo como estos donde los abandonos de animales es creciente debido de al hecho de no poderlos mantener. Hecho que no se podría conseguir sin la paciencia y fuerza de los trabajadores, que viven momentos de tensión porque cobrar a final de mes no está garantizado pero que demuestran, continaunt con el trabajo, que por ellos es algo más. También es importante que todo esto se esté haciendo desde una perspectiva sin ánimo de lucro, sin empresa privada por el medio, garantizando que el más importante son y seguirán siendo los animales. Aunque a estas alturas el SPAM también tenga que mirar por las cuentas y la rentabilidad de según qué maniobras.
