El gobierno municipal ha iniciado un proceso de renegociación con los bancos de la deuda de la empresa municipal de Urbanismo PUMSA. El consejo de administración de la compañía aprobó, en la sesión del pasado 31 de enero, el concurso para contratar una empresa que asesore en esta negociación. PUMSA acumula una deuda de 150 millones de euros y tiene un déficit anual de 6 millones de euros. Por este año 2012 estaba previsto que el Ayuntamiento destinara cerca de 5 millones de euros, pero la imposibilidad de endeudarse más por este año ha supuesto que este dinero no podrán ir a Pumsa . Para hacer frente a la situación el gobierno confía en esta negociación con los bancos para renegociar la deuda. El alcalde, Joan Mora, se mostró confiado de poder llegar a acuerdos con los bancos, a pesar de que no ha querido hacer más declaraciones por discreción y "respecto a la negociación". Otras fuentes señalan, no obstante, que si esta renegociación no funciona, la empresa Pumsa se podría llegar a ver abocada a un concurso de acreedores.
Paral•lelament a la renegociación de la deuda, el gobierno está también negociando una reestructuración de la plantilla de Pumsa. El gobierno municipal presentó a finales del año pasado un plan de reestructuración que pasaba por la reducción de la plantilla en un 50%. Se trata de un plan de redimensionament redactado el 2009 por el anterior gobierno, pero que en su momento no se llegó a aplicar. Según ha podido saber capgròs.com, este ERE se podría resolver con algunas jubilaciones, reducciones de jornada y la recolocación de algunos trabajadores en otros departamentos del Ayuntamiento como por ejemplo Aguas de Busot de Mataró o la futura nueva biblioteca Antoni Comas, y sólo tres trabajadores irían a la calle.
Paral•lelament a la renegociación de la deuda, el gobierno está también negociando una reestructuración de la plantilla de Pumsa. El gobierno municipal presentó a finales del año pasado un plan de reestructuración que pasaba por la reducción de la plantilla en un 50%. Se trata de un plan de redimensionament redactado el 2009 por el anterior gobierno, pero que en su momento no se llegó a aplicar. Según ha podido saber capgròs.com, este ERE se podría resolver con algunas jubilaciones, reducciones de jornada y la recolocación de algunos trabajadores en otros departamentos del Ayuntamiento como por ejemplo Aguas de Busot de Mataró o la futura nueva biblioteca Antoni Comas, y sólo tres trabajadores irían a la calle.