El Cruce de Culturas cierra este fin de semana su quinta edición con los conciertos de Los Chichos, Los Delinqüentes, Manel y Joan Miquel Oliver. Una edición que ha sido marcada por el estreno de un nuevo recinto para los conciertos de gran formato, el Espacio el Arquera. Ha sido la gran apuesta del festival y ha triunfado plenamente. El nuevo escenario, al solar de la antigua Iveco, despertaba bastante dudas. Un lugar inhóspito, sin el encanto del Parque Central, y que se tenía que adecuar en muy pocos días. Pero los organizadores han conseguido crear un espacio acogedor, que sorprende todo el mundo que entra por primera vez, con un gran escenario y un sonido muy limpio y potente, espacio para todo el mundo, varias barras de comer y bebida, palmeras, resina en el tierra para no levantar polvo y lugares de recreo diversos para pasar toda la noche cómodamente. El Cruce necesitaba un recinto así si quería consolidar su presente y futuro, después de las polémicas vecinales vividas alrededor de las actuaciones que se programaron en el Parque Central en años anteriores. Aún así, hay que recordar que el Espacio el Arquera no deja de ser provisional, es un solar que forma parte de un sector que en algún momento u otro se tendrá que desarrollar urbanísticamente. Se ha encontrado la solución por como mínimo un par de años más, pero esto no exime el Ayuntamiento de seguir trabajando para garantizar en el futuro un espacio estable y que se pueda usar durante todo el año.