El precios del peajes de la autopista C-32, que une el Marsme con Barcelona, se congelará durante el 2016, tal y como ya ha pasado este 2015. Pasará el mismo con el resto de autopistas de titularidad de la Generalitat (C-33 y C-16, incluidos los túneles de Vallvidrera y el Cadí), mientras que las autopistas titularidad del estado español, en Cataluña la AP-7 y la AP-2, se bajarán un 0,6% de media a partir del 1 de enero.
En el caso de las autopistas estatales, la reducción sólo se aplicará en tramos de cinco céntimos. Así, tendrá repercusión o no en función del precio final por cada trayecto recurrido a la autopista, de forma que a efectos prácticos en algunos casos el precio quedará congelado. En caso de que la aplicación de este 0,6% suponga un descuento de menos de 2,5 céntimos, el precio no variará; mientras que si la rebaja resultante es de 2,5 céntimos o más, el precio se reducirá en 5 céntimos. La rebaja de las autopistas estatales se debe de al hecho que los precios están vinculados al IPC interanual de noviembre.
En el caso de las autopistas estatales, la reducción sólo se aplicará en tramos de cinco céntimos. Así, tendrá repercusión o no en función del precio final por cada trayecto recurrido a la autopista, de forma que a efectos prácticos en algunos casos el precio quedará congelado. En caso de que la aplicación de este 0,6% suponga un descuento de menos de 2,5 céntimos, el precio no variará; mientras que si la rebaja resultante es de 2,5 céntimos o más, el precio se reducirá en 5 céntimos. La rebaja de las autopistas estatales se debe de al hecho que los precios están vinculados al IPC interanual de noviembre.