El Ayuntamiento de Mataró ha tardado una semana al reaccionar a la iniciativa de un empresario de abrir dos macroprostíbuls al polígono de Las Huertas. Después de siete días de polémica, confrontación y grande rebombori a los medios de comunicación de todo el Estado, que no han dejado Mataró en muy buen lugar, el consistorio ha decidido suspender por decreto el otorgamiento de las licencias de obras y actividades vinculadas a los prostíbulos. Una medida necesaria y mayoritariamente muy recibida pero también un golpe de efecto que llega muy tarde y que de nuevo pone en entredicho el gobierno. Desde el primer momento, los responsables municipales defendieron que tenían las manos ligadas para parar la presencia de los macroprostíbuls en la ciudad, puesto que la concesión de licencias por estos recintos dependía exclusivamente de la Generalitat. Después del cruzamiento de acusaciones con la Generalitat, el decreto de suspensión de licencias ha demostrado que el Ayuntamiento sí podía hacer algo. El alcalde Joan Antoni Baron ha denunciado que los ayuntamientos están indefensos ante las inconcrecions de la normativa vigente que regula este ámbito, el decreto 217-2002 aprobado por un gobierno de CiU. Pero a pesar de que pueda ser verdad, esto no disculpa la carencia de previsión del gobierno municipal, que en su momento no previó la elaboración de una ordenanza propia, tal y como preveía este decreto, que habría ahorrado buena parte de los problemas que se sufren actualmente. El Ayuntamiento no ha reaccionado hasta que vecinos, oposición e incluso la propia Generalitat se le han echado encima. Por último, resulta realmente sorprendiendo que la única víctima política que se ha cobrado hasta ahora este proceso sea el número 2 del PP, el regidor Juan Carlos Ferrando. Ha tenido que dimitir después de que trascendiera que actuó como mediador entre un cliente de su gestoría y el Ayuntamiento para conseguir la licencia por un prostíbulo a la ciudad. Si este hecho secundario, sin relación directa con los polémicos macroprostíbuls, es motivo de dimisión, que pasa con el resto de partes implicadas en todo este proceso?