El 24 de julio, Mataró vivió una jornada que se pudo desarrollar con total normalidad a pesar de la incertidumbre meteorológica, marcando el inicio del tramo central de la Fiesta Mayor. Un día que dejó numerosas instantáneas memorables, donde la tradición y algunas novedades inesperadas fueron las grandes protagonistas.
La Gegantada fue, como siempre, uno de los actos más esperados y multitudinarios. Este año, coincidiendo con el 25º aniversario de la Gegantada, la Coordinadora organizó una coreografía conjunta que culminó con una sorpresa: el nuevo aspecto de Maneló. Después de 75 años, el joven gigante de Robafaves lució una nueva cabellera que impactó y cautivó a los asistentes. Los gigantes, enanos y cabezudos recorrieron las calles de la ciudad, llenándolas de color y música, en un espectáculo que empezó incluso antes del horario previsto.
La jornada también acogió la presentación del cuento de Santes de Capgròs, un evento que invitó a los más pequeños a sumergirse en la magia de la fiesta a través de sus páginas. El acto se celebró en la plaza de Can Xammar, como inicio del festival Nosaltres, con la firma del cuento a cargo de su autor e ilustrador.
Con la caída del sol, la música tomó el relevo con las tradicionales Habaneras. Recuperando su ubicación en el Callao, los grupos participantes ofrecieron una velada inolvidable junto al mar. A pesar del fresco que hizo que muchos se pusieran chaquetas, el ambiente cálido y el tradicional ron quemado deleitaron a los presentes, que entonaron las canciones más emblemáticas de las habaneras.
Además de estos grandes momentos, el día 24 ofreció otras propuestas interesantes. La Llar Cabanelles se estrenó como nuevo espacio de artes escénicas para el público familiar con buena acogida, mientras que en el Patio del Café Nou se rindió homenaje a Joan Peiró Belis con el encendido de su monumento. También cabe destacar la presencia de GospelSons en el Callao, que preparó el ambiente para las habaneras con su enérgico concierto.
Las mejores imágenes del jueves 24