Los representantes del PSC y de ICV-EA han iniciado la tanda de conversaciones que los tiene que traer a un acuerdo programático para el futuro mandato. Después de un primer encuentro informal entre Manuel Mas y Jaume Graupera, que tuvo lugar la semana después de las elecciones y que sirvió para romper el hielo entre las cabezas de lista de las dos formaciones, lunes se sentaron a mesa los "pesos pesants" de los respectivos partidos. El encuentro se celebró al Salón de Leones del Ayuntamiento. Por un lado asistieron Manuel Mas; Joan Antoni Baron, primer secretario del PSC de Mataró; Pilar González, número dos de la lista socialsita y Jaume Puig, secretario de política municipal del PSC. Del otro, Jaume Graupera y Montse Garcia, líderes de ICV y EA, respectivamente; Toni Guirao, presidente local de ICV y Joan Fàbregas y Joan Lleonart, números cuatro y cinco de la lista. No estaban ni Salvador Milà, antiguo alcaldable de ICV, ni los futuros regidores Quitèria Guirao y Josep Comas, hecho que pone de manifiesto el marcado carácter político de la reunión y la voluntad por parte de Graupera de poner de manifiesto el nuevo perfil de ICV-EA.
Tanto Graupera como Baron han valorado positivamente el encuentro en el que se analizaron los doce puntos prioritarios que los ecosocialistas han puesto como condición sine quae non de las negociaciones. "No hay escollos insuperables", ha declarado Baron a capgros.com.
Graupera, que ha subrayado que el alcalde había sido "exquisito", ha ido más allá en su valoración. La cabeza de lista ha explicado que ICV-EA "quiere visualizar que el gobierno de este próximo mandato es plural" y "que los ecosocialistas tienen un papel determinante". Sobre el papel esto se traduce en "cambios" en las formas de gobernar y en el fondo del gobierno.
«Manuel Mas se ha presentado con el mismo equipo a las elecciones y ha perdido tres regidores. ICV-EA se ha renovado profundamente y ha mejorado sus resultados. Esto tiene que quedar reflejado durante este mandato», ha dicho Graupera a capgros.com.
Los ecosocialistas pretenden que alguno de sus doce "mandamientos" supere el acuerdo programático y se materialice antes del 2007. En este sentido, ha hecho referencia explícitamente a las dos nuevas escuelas cuna municipales que contemplaba el programa de ICV-EA. La cabeza de lista ecosocialista también ha insinuado la posibilidad de ampliar el presupuesto del 2003 para dar respuesta a alguna de sus prioridades.
Pero las demandas del "socio fuerte" del PSC no se paran aquí. Graupera ha insistido desde este mismo medio, que ICV-EA no se conformará con tres carteras sino que quiere incidir en la política global del posible gobierno tripartito. En este sentido, el líder ecosocialista ha insinuado que no dejará que carteras básicas de la política de ICV-EA recaigan a manso de regidores socialistas que no han demostrado su solvencia, excepto si previamente se han consensuado muy bien las políticas de aquel ámbito. De forma velada, el alcaldable se ha referido a urbanismo, una de las áreas que más tensiones ha provocado entre las dos formaciones. También ha dejado entender que ICV-EA se opondrá a que cultura recaiga a manso de ERC, tal y cómo se ha empezado a rumorejar, en este caso, por el carácter estratégico que esta cartera tiene para la formación de Graupera.
A pesar de que la distribución de carteras no se decidirá hasta después de haber llegado a un acuerdo programático entre las tres formaciones y haber reestructurado la organización del Ayuntamiento, los representantes ecosocialistas han planteado la posibilidad de reducir el número de carteras, que en función del pacto tripartito podrían llegar a dieciséis. ICV-EA ha ofrecido la posibilidad de renunciar a una de las tres que los correspondería en beneficio de recortar el total de concejalías por debajo las catorce.
Esto implicaría provablement que Josep Comas, condicionado por sus responsabilidades profesionales, pudiera convertirse en regidor sin cartera y asumiera el cargo de portavoz del grupo municipal de ICV-EA.
Por otro lado los ecosocialistas parecen decididos a visualizar su papel de socio decisivo reclamando sentar a la derecha del alcalde, es decir, reclamando que Graupera se convierta en teniente de alcalde del próximo mandato.
Las conversaciones entre PSC e ICV-EA continuarán miércoles con el programa socialista como punto más importante de la orden del día.
Tanto Graupera como Baron han valorado positivamente el encuentro en el que se analizaron los doce puntos prioritarios que los ecosocialistas han puesto como condición sine quae non de las negociaciones. "No hay escollos insuperables", ha declarado Baron a capgros.com.
Graupera, que ha subrayado que el alcalde había sido "exquisito", ha ido más allá en su valoración. La cabeza de lista ha explicado que ICV-EA "quiere visualizar que el gobierno de este próximo mandato es plural" y "que los ecosocialistas tienen un papel determinante". Sobre el papel esto se traduce en "cambios" en las formas de gobernar y en el fondo del gobierno.
«Manuel Mas se ha presentado con el mismo equipo a las elecciones y ha perdido tres regidores. ICV-EA se ha renovado profundamente y ha mejorado sus resultados. Esto tiene que quedar reflejado durante este mandato», ha dicho Graupera a capgros.com.
Los ecosocialistas pretenden que alguno de sus doce "mandamientos" supere el acuerdo programático y se materialice antes del 2007. En este sentido, ha hecho referencia explícitamente a las dos nuevas escuelas cuna municipales que contemplaba el programa de ICV-EA. La cabeza de lista ecosocialista también ha insinuado la posibilidad de ampliar el presupuesto del 2003 para dar respuesta a alguna de sus prioridades.
Pero las demandas del "socio fuerte" del PSC no se paran aquí. Graupera ha insistido desde este mismo medio, que ICV-EA no se conformará con tres carteras sino que quiere incidir en la política global del posible gobierno tripartito. En este sentido, el líder ecosocialista ha insinuado que no dejará que carteras básicas de la política de ICV-EA recaigan a manso de regidores socialistas que no han demostrado su solvencia, excepto si previamente se han consensuado muy bien las políticas de aquel ámbito. De forma velada, el alcaldable se ha referido a urbanismo, una de las áreas que más tensiones ha provocado entre las dos formaciones. También ha dejado entender que ICV-EA se opondrá a que cultura recaiga a manso de ERC, tal y cómo se ha empezado a rumorejar, en este caso, por el carácter estratégico que esta cartera tiene para la formación de Graupera.
A pesar de que la distribución de carteras no se decidirá hasta después de haber llegado a un acuerdo programático entre las tres formaciones y haber reestructurado la organización del Ayuntamiento, los representantes ecosocialistas han planteado la posibilidad de reducir el número de carteras, que en función del pacto tripartito podrían llegar a dieciséis. ICV-EA ha ofrecido la posibilidad de renunciar a una de las tres que los correspondería en beneficio de recortar el total de concejalías por debajo las catorce.
Esto implicaría provablement que Josep Comas, condicionado por sus responsabilidades profesionales, pudiera convertirse en regidor sin cartera y asumiera el cargo de portavoz del grupo municipal de ICV-EA.
Por otro lado los ecosocialistas parecen decididos a visualizar su papel de socio decisivo reclamando sentar a la derecha del alcalde, es decir, reclamando que Graupera se convierta en teniente de alcalde del próximo mandato.
Las conversaciones entre PSC e ICV-EA continuarán miércoles con el programa socialista como punto más importante de la orden del día.