Desde el inicio de la pandemia del coronavirus, el Ayuntamiento de Mataró ha destinado más de 2 millones de euros a mayores gastos derivados de la lucha contra la Covid-19; hemos puesto 3,5 millones a disposición de la Mesa de reconstrucción social y económica; hemos hecho medidas de compensación por actividades que se han visto afectadas por restricciones o cierres (terrazas, paradas de mercados no sedentarios o basura comercial), y hemos habilidad nuevas ayudas (descuentes alquileres viviendas y locales municipales, microcréditos ERTO). Por otro lado, han caído los ingresos como consecuencia del confinamiento y cierre de actividades.
Las previsiones para 2021 indican que los efectos de la pandemia sobre la economía y sobre la ciudadanía serán presentes durante un tiempo, quizás años. Ante esta realidad, el Ayuntamiento continuará combatiendo la crisis sanitaria, apoyando políticas de reactivación económica y ayudante a la emergencia social. Y por eso necesitamos financiación. Financiación que básicamente tiene que provenir de la capacidad fiscal propia (tributos) y de las transferencias otras administraciones (Generalitat, Diputación, Estado, Unión Europea).
A fecha de hoy no se han concretado ayudas otras administraciones para paliar el mayor gasto y los menores ingresos de los ayuntamientos. A fecha de hoy tampoco se ha concretado en que consistirán las ayudas a la reconstrucción. Es por eso que, aunque sea impopular, el Gobierno municipal considera necesario incrementar el principal tributo: el IBI, que es lo destinado a mantener los principales servicios.
El año pasado publicamos por primera vez un Observatorio Fiscal de Mataró donde se ve cuál es la presión fiscal y las comparativas con otras ciudades. La propuesta para 2021 situará el gravamen del IBI residencial en un 0,595, todavía por debajo de la mitad del recorrido fiscal del impuesto (0,615) y por debajo de municipios de similares como Badalona, Terrassa, Santa Coloma de Gramenet o Reos. Con este incremento, que consideramos moderado, el recibo medio residencial subirá 28 € anuales (poco más de 2 € mensuales).
En cuanto a la tasa de la basura domiciliaria, en 2021 tendremos un nuevo y mejor contrato. Durante los últimos años ha sido un clamor popular la necesidad de mejorar el servicio. El mayor coste del servicio comportará un incremento de la tasa entre 18 y 22 euros anuales (menos de 2 € mensuales).
Para pagar los impuestos, hemos previsto como ayudar a las rentas más bajas, ya sean jubilados, pensionistas, personas en paro o sometidas a ERTO con ayudas que llegan a cubrir hasta la mitad del recibo de la basura y hasta 250 € como ayuda a la vivienda. También se amplían las ayudas a las familias numerosas y monoparentales.[banner-AMP_5]
Con el incremento de ingresos por IBI podremos destinar más recursos al Fondo de contingencia por gastos relacionados con la lucha contra la pandemia; más recursos para el Fondo de ayudas y subvenciones fiscales; y más recursos para la Mesa de reconstrucción social y económica de Mataró.
No hacer nada abocaría al empeoramiento de la situación de determinados servicios como la limpieza, la seguridad, o el transporte, frustrando los compromisos de mejora.[banner-AMP_6]
Reconocemos que pedimos un cierto esfuerzo y nos comprometemos a que se perciba. El esfuerzo por la reconstrucción lo estamos haciendo juntos y juntos tenemos que velar por el futuro de la ciudad.