Se ha publicado, recientemente, un alegato contra la indiferencia y a favor de la insurrección pacífica. El libreto se llama Indignaos!, y en él Hessel llamamiento a indignarse, "porque de la indignación nació la resistencia contra el nazismo y de la indignación tiene que surgir la resistencia contra la dictadura de los mercados".
Y tenemos que resistir contra la dictadura de los mercados por qué, recorte a recorte, quieren acabar con nuestro estado del bienestar. En España el PSOE, y en Cataluña CIU no dudan a aplicar las recetas más ultraortodoxes de estos mercados sin escrúpulos, argumentando que no hay otra salida.
El que no dicen, pero, es que los recortes no afectan las ayudas públicas a las cajas y bancos (principales culpables de esta crisis), para salvarlos de su quiebra, y sí en cambio se atreven a recortar los sueldos, congelar pensiones, alargar la edad de jubilación, y un largo etcétera.
Y en casa nuestra? CIU ha emprendido su maquinaria de recortes y así habrá una reducción de un 61% en la contratación de profesorado, habrán menos inversiones en escuelas, en ayudas a las families, en transporte público, en la construcción de hospitales; aumentarán las tasas universitarias, los impuestos para acceder a la vivienda. En cambio, nada de recuperar impuestos como el de Patrimonio o el de Sucesiones, porque esto sería ir contra los poderosos, las clases benestants a las que ellos defienden. Y si esto pasa en el gobierno de la Generalitat, que no puede pasar en un gobierno municipal al frente del cual estén estas fuerzas reaccionarias?
A ICV-EUIA también crece la indignación, pero tenemos que pasar a la acción. Por eso, quieren posicionar la coalición como referente político ante las próximas elecciones municipales.
Porque otra política es posible. En Mataró, por ejemplo, la impronta de nuestra coalición se ha caracterizado para no permitir dejar traslluir en ningún recorte ni en bienestar social, ni en educación. Hemos apostado por la creación de ocupación, por las inversiones (Tecnocampus, escuelas, bibliotecas, rehabilitación de viviendas), por una política de inversiones energéticas sostenibles, y de cara al futuro con unas políticas de tarificación social, de impuestos, más justa (que pague más, quien más tiene).
Porque nuestro objetivo es la ocupación, la justicia social, la igualdad. Porque, todo y nuestra indignación, hacen falta propuestas, alternativas y soluciones, y a ICV-EUIA hemos demostrado, allá donde gobiernamos, que otra política es posible y necesaria, y que somos la garantía de políticas de izquierdas de verdad.
Y tenemos que resistir contra la dictadura de los mercados por qué, recorte a recorte, quieren acabar con nuestro estado del bienestar. En España el PSOE, y en Cataluña CIU no dudan a aplicar las recetas más ultraortodoxes de estos mercados sin escrúpulos, argumentando que no hay otra salida.
El que no dicen, pero, es que los recortes no afectan las ayudas públicas a las cajas y bancos (principales culpables de esta crisis), para salvarlos de su quiebra, y sí en cambio se atreven a recortar los sueldos, congelar pensiones, alargar la edad de jubilación, y un largo etcétera.
Y en casa nuestra? CIU ha emprendido su maquinaria de recortes y así habrá una reducción de un 61% en la contratación de profesorado, habrán menos inversiones en escuelas, en ayudas a las families, en transporte público, en la construcción de hospitales; aumentarán las tasas universitarias, los impuestos para acceder a la vivienda. En cambio, nada de recuperar impuestos como el de Patrimonio o el de Sucesiones, porque esto sería ir contra los poderosos, las clases benestants a las que ellos defienden. Y si esto pasa en el gobierno de la Generalitat, que no puede pasar en un gobierno municipal al frente del cual estén estas fuerzas reaccionarias?
A ICV-EUIA también crece la indignación, pero tenemos que pasar a la acción. Por eso, quieren posicionar la coalición como referente político ante las próximas elecciones municipales.
Porque otra política es posible. En Mataró, por ejemplo, la impronta de nuestra coalición se ha caracterizado para no permitir dejar traslluir en ningún recorte ni en bienestar social, ni en educación. Hemos apostado por la creación de ocupación, por las inversiones (Tecnocampus, escuelas, bibliotecas, rehabilitación de viviendas), por una política de inversiones energéticas sostenibles, y de cara al futuro con unas políticas de tarificación social, de impuestos, más justa (que pague más, quien más tiene).
Porque nuestro objetivo es la ocupación, la justicia social, la igualdad. Porque, todo y nuestra indignación, hacen falta propuestas, alternativas y soluciones, y a ICV-EUIA hemos demostrado, allá donde gobiernamos, que otra política es posible y necesaria, y que somos la garantía de políticas de izquierdas de verdad.