Podemos definir la autoestima como una actitut generalizada hacia uno/a mismo/a, tanto positva como negativa. A lo largo de la historia ha sido un disparo poco valorado en le mujeres. "Ser femenina" se identificaba con la pasividad, con la complaença a otras personas, con la dependencia y con el sacrificio personal en beneficio otras personas.
Algunos de los elementos generales y comunes que más influyen en la configuración de la autoestima de la mujer son:
∑ El modelo social del que "significa" ser mujer.
∑ La falta de pareja, la separación, el divorcio o no querer ser madre.
∑ La gran cantidad de roles que la mujer tiene que ejercer.
La sociedad nos presenta un modelo del que significa ser mujer: ser frágil, dependiente, sumisa, estar siempre dedicada a la familia, etc. Aunque este modelo está cambiante, la mayoría de las mujeres crecieron en él o están relacionadas con personas que todavía lo cruzan. Esta descripción de la mujer nos envía dos mensajes que constituyen un ataque hacia la autoestima:
∑ Hay muchas cosas que tú, por el hecho de ser mujer, no puedes hacer y necesitas alguien fuerte y capaz que lo haga o te ayude. Es decir, no eres capaz de valerte por tú misma.
∑ Las necesidades y deseos de la gente que aprecios están antes de que los tuyos. Al extremo de esta idea encontramos, por lo tanto, que tú eres poco importante.
Hasta hace poco tiempo se pensaba que la máxima de las mujeres era casarse y tener hijos. Equivocadamente, hay personas que piensan que si una mujer no quiere mantener una relación de pareja y tener hijos es porque ella "debe de estar mal". La sociedad acostumbra a responsabilizar a la mujer del resultado de todas sus relaciones, porque ser mujer es ser cariñosa, paciente, entregada, aguantadora, etc. Si la mujer cree sólo en estos conceptos, su autoestima baja.
Por otro lado, la cultura exige que la mujer sea madre, esposa, hija, ama de casa, cocinera, amiga, etc. Caricaturizando, que esté dispuesta 24 horas al día, para cumplir con las "obligaciones" de todos sus roles. Y además, que lo haga perfectamente y sin enojarse. Si la mujer trabaja fuera de la casa su situación se complica, porque tiene que cumplir con el trabajo, sin descuidar sus otras obligaciones. Esto es imposible. Pero si la mujer cree que es su deber o tiene una baja autoestima, puede intentar hacerlo. Digo intentar porque esto supondría querer ser una "superdona", para demostrar y demostrarse, su valor y capacidad. A buen seguro, que no se podrá conseguir y entonces esto supondrá de nuevo, un golpe por la autoestima.
Con esto, quiero decir que cuando hablamos de la necesidad de fortalecer y mejorar la autoestima, las mujeres, además de trabajar los factores individuales y personales implicados en esta tarea, tenemos que tener en cuenta estos factores más sociales, culturales y educacionales.
Algunos de los elementos generales y comunes que más influyen en la configuración de la autoestima de la mujer son:
∑ El modelo social del que "significa" ser mujer.
∑ La falta de pareja, la separación, el divorcio o no querer ser madre.
∑ La gran cantidad de roles que la mujer tiene que ejercer.
La sociedad nos presenta un modelo del que significa ser mujer: ser frágil, dependiente, sumisa, estar siempre dedicada a la familia, etc. Aunque este modelo está cambiante, la mayoría de las mujeres crecieron en él o están relacionadas con personas que todavía lo cruzan. Esta descripción de la mujer nos envía dos mensajes que constituyen un ataque hacia la autoestima:
∑ Hay muchas cosas que tú, por el hecho de ser mujer, no puedes hacer y necesitas alguien fuerte y capaz que lo haga o te ayude. Es decir, no eres capaz de valerte por tú misma.
∑ Las necesidades y deseos de la gente que aprecios están antes de que los tuyos. Al extremo de esta idea encontramos, por lo tanto, que tú eres poco importante.
Hasta hace poco tiempo se pensaba que la máxima de las mujeres era casarse y tener hijos. Equivocadamente, hay personas que piensan que si una mujer no quiere mantener una relación de pareja y tener hijos es porque ella "debe de estar mal". La sociedad acostumbra a responsabilizar a la mujer del resultado de todas sus relaciones, porque ser mujer es ser cariñosa, paciente, entregada, aguantadora, etc. Si la mujer cree sólo en estos conceptos, su autoestima baja.
Por otro lado, la cultura exige que la mujer sea madre, esposa, hija, ama de casa, cocinera, amiga, etc. Caricaturizando, que esté dispuesta 24 horas al día, para cumplir con las "obligaciones" de todos sus roles. Y además, que lo haga perfectamente y sin enojarse. Si la mujer trabaja fuera de la casa su situación se complica, porque tiene que cumplir con el trabajo, sin descuidar sus otras obligaciones. Esto es imposible. Pero si la mujer cree que es su deber o tiene una baja autoestima, puede intentar hacerlo. Digo intentar porque esto supondría querer ser una "superdona", para demostrar y demostrarse, su valor y capacidad. A buen seguro, que no se podrá conseguir y entonces esto supondrá de nuevo, un golpe por la autoestima.
Con esto, quiero decir que cuando hablamos de la necesidad de fortalecer y mejorar la autoestima, las mujeres, además de trabajar los factores individuales y personales implicados en esta tarea, tenemos que tener en cuenta estos factores más sociales, culturales y educacionales.