La estrella de la torre de la Virgen María de la Sagrada Familia volverá a iluminarse. La Vanguardia ha adelantado que el próximo jueves se aprobará el permiso y que el viernes, tres días antes del inicio del Mobile World Congress, la estrella de Maria volverá a brillar. Hecha en Mataró por el vidriero David Gibernau, la estrella se elevó a finales de noviembre y, desde entonces, se ha convertido en uno de los símbolos del monumento. Tiene un diámetro de 7,5 metros y pesa 5,5 toneladas.
Habrá costado más de un mes y medio y el permiso será provisional, pero finalmente la iluminación de la Sagrada Familia está prevista que entre a la orden del día de la próxima reunión de la comisión mixta de Protección del Paisaje Urbano, según explica La Vanguardia.
La simbólica pieza, situada a 138 metros de altura, se encendió el 8 de diciembre pasado después de una solemne ceremonia, con mensaje del Papa incluido, y brilló hasta después de Navidad. Desde entonces, la Sagrada Familia y el Ayuntamiento de Barcelona han intentado consensuar las condiciones de iluminación de la estrella.
Hecha de vidrio texturado con una estructura de acero inoxidable en las aristas, de día los vidrios estarán iluminados por el sol y por la noche, la claridad surgirá del interior, desde los focos instalados en la base de las puntas. La instalación se ha diseñado teniendo en cuenta las inclemencias del tiempo que tendrá que soportar, desde el calor, el frío y la lluvia hasta la eventual caída de un rayo.