La huelga de los controladores de las zonas azules está provocando problemas de aparcamiento en superficie puesto que muchos ciudadanos aprovechan que las máquinas están cerradas y que no tienen que pagar para estacionar a las plazas de rotación. Yo, que siempre aparco en zona azul cuando vengo a Mataró, he tenido que ir al aparcamiento de la plaza Santa porque no he encontrado lugar en la calle, se lamentaba ayer Mar Garcia, una vecina de Granollers que trabaja en la ciudad. Del mismo parecer es el propietario de una tienda de animales del centro, Josep Viadé, que asegura que al centro el aparcamiento "está colapsado". "Acostumbro a aparcar en zona azul y he notado cien veces más dificultad al encontrar lugar para aparcar", asegura Viadé, que también considera que la zona azul se buena por los tenderos "porque hay mucha rotación.
Por la contra, Josep Maria Tarragona, comercial de Barcelona que trabaja en Mataró, asegura que no ha notado ninguna diferencia a la hora de aparcar. Yo siempre me voy directamente a las zonas azules y hoy no he notado una especial dificultad", afirma. Tarragona también reconoce que las zonas azules son prácticas, sobre todo "para los que venimos a trabajar de fuera en coche". Como la mayoría de ciudadanos, este comercial desconocía que había huelga de controladores de zonas azules hasta que ha visto un cartel al parquímetro "cuando he ido a pagar".
Los vigilantes de las zonas azules de Mataró, Arenys de Mar y Pineda de Mar han realizado hoy la segunda jornada de la huelga indifinida convocada por el sindicato UGT y con la que los trabajadores quieren reivindicar mejoras en el convenio que aplica la empresa Estacionamientos y Servicios S.A. (Eysa). Actualmente son una quincena de trabajadores los que secundan la parada después de que las delegaciones de Eysa en Premià de Mar, Vilassar de Mar y Mollet del Vallès hayan decidido hoy desconvocarla, y después de que se haya incluido dentro del pliegue de condiciones una cláusula que garantiza la aplicación del convenio catalán.
Los vigilantes de las zonas azules que todavía mantienen la protesta reclaman que se aplique el convenio catalán puesto que establece mejoras salariales y los reconoce profesionalmente con una categoría superior. El delegado de Eysa en Mataró, José Casado, ha explicado que todavía no se han podido reunir con la empresa y que en los próximos días se podrían añadir a la huelga los vigilantes de Barcelona, Manresa y Lleida.
Por la contra, Josep Maria Tarragona, comercial de Barcelona que trabaja en Mataró, asegura que no ha notado ninguna diferencia a la hora de aparcar. Yo siempre me voy directamente a las zonas azules y hoy no he notado una especial dificultad", afirma. Tarragona también reconoce que las zonas azules son prácticas, sobre todo "para los que venimos a trabajar de fuera en coche". Como la mayoría de ciudadanos, este comercial desconocía que había huelga de controladores de zonas azules hasta que ha visto un cartel al parquímetro "cuando he ido a pagar".
Los vigilantes de las zonas azules de Mataró, Arenys de Mar y Pineda de Mar han realizado hoy la segunda jornada de la huelga indifinida convocada por el sindicato UGT y con la que los trabajadores quieren reivindicar mejoras en el convenio que aplica la empresa Estacionamientos y Servicios S.A. (Eysa). Actualmente son una quincena de trabajadores los que secundan la parada después de que las delegaciones de Eysa en Premià de Mar, Vilassar de Mar y Mollet del Vallès hayan decidido hoy desconvocarla, y después de que se haya incluido dentro del pliegue de condiciones una cláusula que garantiza la aplicación del convenio catalán.
Los vigilantes de las zonas azules que todavía mantienen la protesta reclaman que se aplique el convenio catalán puesto que establece mejoras salariales y los reconoce profesionalmente con una categoría superior. El delegado de Eysa en Mataró, José Casado, ha explicado que todavía no se han podido reunir con la empresa y que en los próximos días se podrían añadir a la huelga los vigilantes de Barcelona, Manresa y Lleida.