Quizás ya es hora de colocar la lluvia dentro del programa de actas oficial de Las Santas, aunque sea con un asterisco que indique "fecha variable". Porque últimamente no ha habido prácticamente ninguna edición en que un aguacero no haya hecho acto de presencia muy puntual dispuesto a estropear la Fiesta. El capítulo vivido viernes con la suspensión del concierto de Melendi es el enésimo de los últimos años.
2010: sin Chasquido Final
El primero se remonta al año 2010, cuando la lluvia entró en tromba el día 29 y obligó a suspender lo Vamos a Cerrar –el último pasacalle de la Fiesta- y el Chasquido Final, el último baile que tenían que protagonizar las orquestas Cimarron y la Salseta del Pueblo Seco. Sólo respetó la Tronada de Fin de Fiesta. Mucha gente comentó entonces que hacía años que la lluvia no hacía acto de presencia a Las Santas. El que nadie sabía es que había llegado para quedarse; hasta este año no ha faltado ni un solo golpe en la Fiesta.
2011: caos y fiestas alternativas
Uno de los días más caóticos debido a la meteorología se vivió el año siguiente, el 26 de julio de 2011. Un fuerte aguacero obligó a suspender la Postal de Gigantes apenas cuando acababa de empezar el acto. En Maneló y la Toneta, así como los gigantes de Santa Maria del Mar (figuras invitadas) se pudieron ubicar bajo un balcó, mientras que en Robafaves y la Giganta finalmente se van resguardar en un aparcamiento ofrecido al instante por un vecino de la calle.
La Giganta, bajo cubierto a la Postal de Gigantes de 2011
El anochecer se mantuvo lluvioso y obligó a anular el Baile de Fiesta Mayor previsto al Parque. Pero a media noche ya no caía ni una gota, y miles de personas tenían ganas de fiesta después de una tarde a remojo. Bien pronto aparecieron fiestas alternativas, como la que montó de manera improvisada la pandilla de los Renacuajos a su local del Matadero. "Nos lo hemos planteado mientras cenábamos y en un par de horas lo hemos tenido preparado. Internet ha hecho el resto", explicaba el entonces presidente de la pandilla castellera, Jordi Fornells. La fiesta fue todo un éxito, todo va poner de nuevo de manifiesto que Mataró necesitaba un espacio polivalente a cubierto. Seis años más tarde, nada se sabe de este equipamiento tan reclamado.
Fiesta alternativa al local de los Renacuajos
2013: El No hay bastante se fusiona con la Rociada
El 2012 la lluvia también se dejó notar, a pesar de que menos que el año anterior, con apariciones en actas como los monólogos de Club de la Comedia que se celebraron en el Parque Central. Se puede considerar que aquel año fue una tregua, puesto que al siguiente la meteorología volvió a hacer la pascua de lo lindo. El día 28, a las tres de la madrugada, cuando lo No hay bastante! Encaraba su final, el cielo se desplomó sobre la cabeza de las figuras, los músicos de la Principal de la Noche y los centenares de personas que se apiñaban a las puertas del Ayuntamiento. Las pandillas entraron las figuras deprisa y corriendo al Ayuntamiento por resguardar-las del aguacero, y los músicos buscaron refugio. Parecía que la noche se cerraba de manera repentina, pero la lluvia ni mucho menos va aigualir las ganas de fiesta de los asistentes, que en aquel momento se encontraban en el máximo grado de euforia. Muchos siguieron saltando y bailando bajo el aguacero, cantando el Bequetero, como si la lluvia fuera en realidad una nueva versión de la Rociada.[banner-AMP_5]
Buscando protección en el Ayuntamiento en el No basta de 2013
2014: Sin Requisitos, pero la juliana salvada
El día 28 también fue la víctima del mal tiempo en 2014, a pesar de que en este caso el No hay bastante sí que se pudo salvar. No así la gran mayoría de actas del día, como el Baile de Requisitos. Pero la juliana, la bebida dulce, afruitada y alcohólica que sólo se sirve durante la noche del 28 en este baile, sí que se pudo beber al local de los Renacuajos, que acogió lo Vamos de Cañas (previsto originalmente a la plaza de Santa Anna). El Local de los Renacuajos sirvió de refugio para los más optimistas, que a pesar de que seguía lloviendo, confiaban que el No hay bastante se acabaría celebrando. E hicieron bien, porque el cielo dio una tregua y la "segunda Noche Loca" pudo estallar con toda su fuerza[banner-AMP_6]
2015: lluvia insolidaria
El año pasado, después de esta mala racha, parecía imposible que lloviera por Santas, especialmente después de haber vivido un julio cálido y seco como no se recordaba. Pero llegó la Fiesta Mayor y con ella, la lluvia, que estropeó uno de los actos más especiales y masivos de la Fiesta, el DisSantes de la Fundación Maresme al Nuevo Parque Central. El fuerte aguacero que cayó hacia la 1 de la madrugada impidió que se celebraran los esperados conciertos de Los Buhos y La Pegatina, que tenían que poner la cirereta en toda una jornada de actas a favor del colectivo de personas con discapacitado. Pero un año más se puso de manifiesto que la lluvia no aigualia las ganas de fiesta de los mataronins, que siguieron congregados ante el escenario hasta que desde el Ayuntamiento se improvisó la aparición de un DJ –Joan Sala- que va saciar-los con su sesión hasta muy entrada la madrugada.[banner-AMP_7]
Bailando bajo la lluvia al DisSantes 2015
2016: 'Tocados y hundidos'
El capítulo vivido el año pasado al DisSantes ha traído el Ayuntamiento a cubrir dos de los escenarios de la Fiesta Mayor, el del Nuevo Parque Central –que vuelve a acoger este sábado la fiesta solidaria, este golpe con los Catarres como reclamo- y el de la plaza de Santa Anna, de cara a evitar estas cancelaciones. En cambio, el del Parque Central viejo no está cubierto. Más allá del concierto de Melendi, donde gran parte de la estructura del escenario iba a cargo del músico y su promotora, el resto de actas que acoge este recinto no son tan masivos como el de los otros dos escenarios que sí se han cubierto. Este hecho, pero, trajo a la suspensión del concierto del cantante de Asturias puesto que, un golpe más, porque no falla nunca, la lluvia decidió que tocaba remojar los mataronins por Las Santas. La meteorología ha dejar los fans de Melendi, como dice una de sus canciones más célebres, "Tocados y hundidos"[banner-AMP_8]