El alcalde de Mataró, Joan Antoni Baron, colocó sábado la primera piedra del equipamiento municipal que acogerá la sede de los Renacuajos a partir de noviembre de 2007, si se cumplen los plazos de ejecución de las obras previstos.
Finalmente, el nuevo edificio tendrá planta baja y un semisoterrani y no de cuatro plantas como se había proyectado en un principio. En el pleno del mes de noviembre, el ayuntamiento aprobó la modificación del proyecto básico del edificio, que tiene un presupuesto de 1.669.920 euros.
Los Renacuajos quieren que el nuevo local sea "un espacio abierto en Mataró y el Maresme y a todas sus entidades", según ha explicado el capataz, Xevi Castellví. El equipamiento, situado en la calle Herrera, tendrá una superficie de 1.040 metros cuadrados.
En el edificio se accederá por la planta semisoterrània, donde habrá la recepción y las oficinas, además de una sala de recuperación, una sala polivalente, una sala de música, un almacén y una sala para instalaciones relacionadas con la actividad de la pandilla.
A la planta baja se ubicará la sala principal de la nave, una habitación en forma de cubo 10x10x10 metros. De este modo, los castellers podrán ensayar construcciones importantes sin condicionantes, puesto que actualmente la poca altura del local de ensayo los obliga a ensayar muchos golpes al exterior. "Si llueve o hace frío, tenemos que hacer los castillos adentro y enseguida tocamos el techo", lamenta Castellví.
Un bar, una sala polivalente y vestuarios para hombres y mujeres complementarán este piso. Los vestuarios eran otra de las reclamaciones de la pandilla, que en su actual local no disponen de duchas.
El nuevo local de los Renacuajos se construïrà dentro del recinto modernista del antiguo Matadero, proyectado por el ingeniero Melcior de Palau en 1915 y declarado bien cultural de interés local y protegido por el Pla Especia de Patrimonio Arquitectónico. El recinto cuenta con tres naves relacionadas entre sí por unos pasos cubiertos y otras edificaciones auxiliares como corrales, la portería o un depósito de agua.
Finalmente, el nuevo edificio tendrá planta baja y un semisoterrani y no de cuatro plantas como se había proyectado en un principio. En el pleno del mes de noviembre, el ayuntamiento aprobó la modificación del proyecto básico del edificio, que tiene un presupuesto de 1.669.920 euros.
Los Renacuajos quieren que el nuevo local sea "un espacio abierto en Mataró y el Maresme y a todas sus entidades", según ha explicado el capataz, Xevi Castellví. El equipamiento, situado en la calle Herrera, tendrá una superficie de 1.040 metros cuadrados.
En el edificio se accederá por la planta semisoterrània, donde habrá la recepción y las oficinas, además de una sala de recuperación, una sala polivalente, una sala de música, un almacén y una sala para instalaciones relacionadas con la actividad de la pandilla.
A la planta baja se ubicará la sala principal de la nave, una habitación en forma de cubo 10x10x10 metros. De este modo, los castellers podrán ensayar construcciones importantes sin condicionantes, puesto que actualmente la poca altura del local de ensayo los obliga a ensayar muchos golpes al exterior. "Si llueve o hace frío, tenemos que hacer los castillos adentro y enseguida tocamos el techo", lamenta Castellví.
Un bar, una sala polivalente y vestuarios para hombres y mujeres complementarán este piso. Los vestuarios eran otra de las reclamaciones de la pandilla, que en su actual local no disponen de duchas.
El nuevo local de los Renacuajos se construïrà dentro del recinto modernista del antiguo Matadero, proyectado por el ingeniero Melcior de Palau en 1915 y declarado bien cultural de interés local y protegido por el Pla Especia de Patrimonio Arquitectónico. El recinto cuenta con tres naves relacionadas entre sí por unos pasos cubiertos y otras edificaciones auxiliares como corrales, la portería o un depósito de agua.