Quién quisiera aprovechar el festivo 5 de junio para venir de compras al centro urbano de Mataró hizo el viaje va. Prácticamente todas las tiendas tenían las persianas abajo. El malestar de la Unión de Tenderos por el que considera una decisión unilateral del Instituto Municipal de Promoción Económica (IMPEM) al permitir abrir los comercios el lunes de la Feria se tradujo en un cierre generalizado. Los hechos han significado un golpe fuerte en el gobierno municipal, afirma el secretario general de la entidad, Josep Filbà, que advierte de la necesidad que el sector se replantee las relaciones con el gobierno. En el Mataró Parco, en cambio, todos los establecimientos tuvieron actividad y la afluencia de clientes fue comparable, según los responsables del complejo, a la de un sábado de principios de mes.
Las tiendas de la ciudad fueron consecuentes con los carteles que parte de ellas exhibían con el lema El comercio de Mataró dice No. Incluso la Unión de Tenderos, impulsora de la campaña, ha expresado su sorpresa ante el masivo seguimiento de la petición de rechazo al establecimiento del lunes 5 de junio como jornada autorizada para la apertura comercial. Ni grandes operadores como Zara o Massimo Dutti, que siempre han aprovechado los festivos para abrir, lo han hecho, valora Filbà. La Unión de Tenderos cree que el escaso número de tiendas que ayer abrieron pone de manifiesto el hecho que se ha forzado una demanda que el sector no exige. El secretario general de la Unión de Tenderos tilda de desgraciado y pérdida de tiempo y dinero el proceso que habido detrás y acusa la prepotencia del gobierno y el engaño de que se ha hecho víctima, dice, al consumidor. Cualquier futura campaña perderá credibilidad, apunta.
La Unión de Tenderos ha entrado esta mañana al Ayuntamiento un documento firmado por todas las asociaciones que lo engloban donde pide audiencia al alcalde, Joan Antoni Baron. El sector reclama que se lo tenga más en cuenta de cara a futuras acciones y asegura que hay que determinar cuáles serán a partir de ahora sus relaciones con el gobierno municipal. Todo el mundo se ha sentido muy maltratado. Tenemos que ver qué papel jugamos, avisa Filbà.
La presidenta de la IMPEM, Alícia Romero, asegura que "la actitud y la voluntad" del gobierno municipal es "retomar las relaciones con normalidad" con el sector comercial de la ciudad. "Seria lo más lógico, aunque no siempre poguem estar de acuerdo", ha dicho. "Nosotros tomamos una decisión y no lo hicimos en detrimento de nadie", apunta. La regidora ha manifestado su intención de "sentar" y hablar con las asociaciones de comerciantes, con las cuales intentará "conseguir un consenso" de cara al año que viene. Romero no descarta, pues, que la iniciativa se repita.
Los observadores de la Unión de Tenderos detectaron cuatro establecimientos abiertos en Mataró Centro, dos de los cuales están regentados por chinos, que no siguen habitualmente las pautas del resto de comercios, y otro a los entornos de la plaza Granollers. Romero reconoce que la respuesta ha sido "mínima". "Creíamos que había una oportunidad que se podía aprovechar. Nosotros hemos abierto el camino. Pero respetamos el que cada comerciante haga a nivel privado", afirma.
El presidente de la asociación Nuevo Centro, Jordi Llargués, cree que el número de tiendas que realmente secundaron el rechazo a la propuesta de la IMPEM se tiene que calcular sin tener en cuenta las que ya cerraron el año pasado, en la fecha por la cual se ha cambiado el 5 de junio. Los que no han abierto pero no tenían los carteles colgados son los mismos que tampoco lo habrían hecho el 20 de agosto. Llargués admite, pero, que finalmente se ha hecho una antipromoció de la ciudad y espera que la mala imagen que se ha dado no tenga repercusiones nefastas para la ciudad.
Gran afluencia de barceloneses en el Mataró Parco
Mientras tanto, en el Mataró Parco hubo actividad durante todo el día. El gerente del complejo, Arturo Soler, destaca que tanto la afluencia de clientes como el global de venta durante el día de ayer fue similar al de un viernes o un sábado de principios de mes. Un volumen importante de las personas que ayer hicieron sus compras en el Mataró Parco vendía de Barcelona. El mayor movimiento de clientes se vio por la mañana. Por la tarde, la gente debía de preferir ir a la playa o a la Feria o volver a Barcelona", comenta.
El grupo municipal de CiU ya ha emitido un comunicado donde pide "explicaciones" en el gobierno por el que considera una "jornada muy negativa" y "mínimant seguida por los comercios de Mataró".