Los operadores podrán volver a instalar nuevas antenas de telefonía móvil a todo el término municipal de Mataró. A mediados del próximo mes de abril se levantará definitivamente la suspensión de licencias de ampliación o nueva instalación de antenas, instaurada dos años antes por el Ayuntamiento para facilitar la tramitación del Plan especial urbanístico y la modificación del ordenanza que regula su emplazamiento, que precisamente se aprueba inicialmente al Pleno de mañana. Lo ha explicado hoy la regidora de Ciutat Sostenible, Quitèria Guirao, en la presentación de los contenidos de la nueva ordenanza.
El levantamiento de la moratoria permitirá la llegada de las estaciones baso de radiocomunicación UMTS, el sistema de móviles de tercera generación, que ya tiene mucha presencia al mercado de la telefonía móvil. Los operadores, presionados por las exigencias del mercado, han decidido en muchos casos echar por el derecho y ampliar las instalaciones existentes para adaptarlas a la tecnología UMTS. El Ayuntamiento ha abierto por este motivo hasta 16 expedientes de disciplina durante estos dos años de suspensión de licencias. También se desmanteló una nueva antena instalada sin licencia.
El control de las estaciones UMTS es una de las novedades del ordenanza, que tiene como objetivo regular las instalaciones actuales de apoyo a la telefonía móvil y las otras tecnologías que puedan aparecer en el futuro. El ordenanza, entre sus principales objetivos, quiere promover que los operadores compartan los emplazamientos de las antenas (un mismo operador podrá funcionar con un máximo de 2 operadores más dentro del casco urbano y 3 si es afuera), para evitar que se multiplique su presencia a las azoteas de los edificios de la ciudad. Una iniciativa complicada, puesto que los operadores utilizan la ubicación de sus antenas como estrategia de mercado de cara a tener más cobertura.
Además, la concesión de licencias obligará a los operadores, a partir de abril, a utilizar la mejor tecnología posible para reducir el impacto visual y paisajístico, y a orientar los aparatos de manera adecuada para minimizar el nivel de immissions de campos electromagnéticos hacia las viviendas situadas a menos de 100 metros cuadrados respecto a la antena. Para obtener una licencia, las empresas tendrán que presentar una ficha técnica de las características de la instalación y un estudio acústico. Las instalaciones que tienen licencia concedida tendrán que adaptarse a la nueva ordenanza si9 amplían o modifican elementos.
Explicarlo bien a la ciudadanía
El nuevo texto incorpora sugerencias específicas de la Federación de Asociaciones de Vecinos de Mataró (FAVM), una de las entidades integrantes de la comisión de seguimiento del Plan especial urbanístico para la ordenación de los emplazamientos de las instalaciones de radiocomunicación. Guirao ha asegurado que ahora hay que explicar bien el cambio de normativa a los ciudadanos. La regidora ha explicado que es inviable ubicar las antenas fuera del casco urbano, tal y cómo pide la asociación ambiental Oikos, también integrando de la comisión de seguimiento. Cuanto más lejos estén los teléfonos de sus antenas, más fuerte tendrá que ser la radiación, ha dicho Guirao. El radio de cobertura de las antenas de telefonía móvil establecidas a la ciudad es de 500 metros.
El levantamiento de la moratoria permitirá la llegada de las estaciones baso de radiocomunicación UMTS, el sistema de móviles de tercera generación, que ya tiene mucha presencia al mercado de la telefonía móvil. Los operadores, presionados por las exigencias del mercado, han decidido en muchos casos echar por el derecho y ampliar las instalaciones existentes para adaptarlas a la tecnología UMTS. El Ayuntamiento ha abierto por este motivo hasta 16 expedientes de disciplina durante estos dos años de suspensión de licencias. También se desmanteló una nueva antena instalada sin licencia.
El control de las estaciones UMTS es una de las novedades del ordenanza, que tiene como objetivo regular las instalaciones actuales de apoyo a la telefonía móvil y las otras tecnologías que puedan aparecer en el futuro. El ordenanza, entre sus principales objetivos, quiere promover que los operadores compartan los emplazamientos de las antenas (un mismo operador podrá funcionar con un máximo de 2 operadores más dentro del casco urbano y 3 si es afuera), para evitar que se multiplique su presencia a las azoteas de los edificios de la ciudad. Una iniciativa complicada, puesto que los operadores utilizan la ubicación de sus antenas como estrategia de mercado de cara a tener más cobertura.
Además, la concesión de licencias obligará a los operadores, a partir de abril, a utilizar la mejor tecnología posible para reducir el impacto visual y paisajístico, y a orientar los aparatos de manera adecuada para minimizar el nivel de immissions de campos electromagnéticos hacia las viviendas situadas a menos de 100 metros cuadrados respecto a la antena. Para obtener una licencia, las empresas tendrán que presentar una ficha técnica de las características de la instalación y un estudio acústico. Las instalaciones que tienen licencia concedida tendrán que adaptarse a la nueva ordenanza si9 amplían o modifican elementos.
Explicarlo bien a la ciudadanía
El nuevo texto incorpora sugerencias específicas de la Federación de Asociaciones de Vecinos de Mataró (FAVM), una de las entidades integrantes de la comisión de seguimiento del Plan especial urbanístico para la ordenación de los emplazamientos de las instalaciones de radiocomunicación. Guirao ha asegurado que ahora hay que explicar bien el cambio de normativa a los ciudadanos. La regidora ha explicado que es inviable ubicar las antenas fuera del casco urbano, tal y cómo pide la asociación ambiental Oikos, también integrando de la comisión de seguimiento. Cuanto más lejos estén los teléfonos de sus antenas, más fuerte tendrá que ser la radiación, ha dicho Guirao. El radio de cobertura de las antenas de telefonía móvil establecidas a la ciudad es de 500 metros.