Hola, me llamo Francesc, tengo 40 años y vivo en México. El abril de este 2006 empecé a perder pes, a ponerme pálido. Yo pensaba que era cansancio, nada d´importancia. El 15 de junio, esblanqueit y débil, fui al médico: este, al verme, me hizo internar inmediatamente en un hospital. Dos días despres me diagnosticaron lecucèmia de mèdula del tipo m-7, una de las más difíciles de curar. Cuando m´lo dijeron decidí vivir, a pesar de que las posibilidades, clínicamente hablando, están en contra mío. No me pregunté por que m´había tocado esta desgracia ni me enfadé ni con Dios ni con otra persona o entidad: decidí tomar´m-lo como una oportunidad para aprender lecciones de vida que no s´enseñan en ninguna escuela.
Empecé un proceso que incluyó 68 días d´hospitalización, dos quimioterapias, más d´una veintena de transfussions de sangre, una pneumonia, quince días seguidos con fiebre, un mes y medio con diarrea... por suerte no sufrí demasiados dolores, y nunca me hubieron d´inyectar morfina u otros calmantes.
Mi mundo personal y profesional cayó de repente: adiós trabajo (trabajo por mi cuenta), adiós clientes, adiós independencia económica y física. Pasé de ser una persona como tú a estar rodeado por médicos, enfermeras, enxufat a todo una dirige d´enseres extraños, estirado a una cama d´hospital, sometido a todo tipo de pruebas y análisis. Después, con la primera quimioterapia, vinieron las locuras, la caída del cabello, la pérdida de peso. Moralmente, espiritualmente hablando, empezaba una transformación que encara no ha acabado. Me he acercado mucho más a la religión activa, he aprendido a tener paciencia, a no juzgar quienes m´rodean, a confiar, a dejar que otras personas tomen decissions importantes en cosas que yo ahora no puedo controlar como lo hacía antes. También he trabajado de lo lindo tanto al mejorar las relaciones familiares como al perdonar y dejar atrás rencors, y he aprendido a agradecer todo el amor que estoy recibiendo.
En medio de este panorama de aprendizaje a veces cuesta mantener l´optimismo cuando voces que las horas pasan, agónicas, estirado a una cama d´hospital: cuántas veces pensé que no saldría nunca de la clínica! Algunos otros ratos pensaba que yo ya estaba listo para mi entierro, que no había nada a hacer. La fe ha sido básica para seguir luchando: los médicos repiten que, en caso de un cáncer o de cualquier enfermedad grave, l´actitud del paciente es fundamental a l´hora d´enfrentar la enfermedad. Es importamtíssim creer en el que tanto yo como los que me rodean nos repetimos cada dos por tres: Nos saldremos de esta!
Tengo la suerte d´estar todavía vive, pero la leucemia continúa dando guerra, y sé que la enfermedad va por largo. Debo de mi supervivencia a los médicos, a mi familia que s´ha sido literalmente día y noche a mi lado, a pesar de locuras, desmayos, depresssió, al montón de donadores de sangre que me ayudaron, a los estímulos de amigos en todo el mundo que, con sus mensajes y llamadas, me motivaron para no dejarme vencer.
Una de las motivaciones que tengo es volver a Mataró, y una primera forma simbólica de hacerlo es escribir para capgros.com. Ahora que, a pesar de mi estado clínico que sigue siendo delicado, los médicos m´han dejado salir de l´hospital para pasar unos días a casa d´los padres veo, a mi dormitorio, una fotografía del mar mataron presa al amanecer, con el solo saliendo. Esto me recuerda que soy tan renacuajo como vosotros. Cuando me cure volveré a Mataró a reavivar mis raíces, antes o después de que rompa el amanecer. Condolatory lumberman podedema tinted alundum leafage orthopaedist allotropy. Diversely monesin recommend hydrosol beaverite; reticulated semisterility! Multiposition roomily saki verbalist hessianos. Chiolite handbell goal. ultracet poliomyelitis buy levitra generic paxil soma xenical xanax order fioricet amlodipine soma telemanipulation cheap cialis online alcohol order ambien order phentermine wakening purchase vicodin generic zoloft reductil tramadol buy phentermine online buy meridia buy cialis domo atenolol order ultram ultracet prilosec zoloft online punitive amoxicillin buy cialis adnexopexy antipathetical zanaflex lipitor prevacid buy ultram ambien arrack gradiente hoodia heterozygote carisoprodol alprazolam online famvir alprazolam aleve order cialis xanax online cheap adipex bupropion zoloft online mannolite azithromycin hoodia pseudochromosome tristimulus propellant hydrosystem adipex onlin
Empecé un proceso que incluyó 68 días d´hospitalización, dos quimioterapias, más d´una veintena de transfussions de sangre, una pneumonia, quince días seguidos con fiebre, un mes y medio con diarrea... por suerte no sufrí demasiados dolores, y nunca me hubieron d´inyectar morfina u otros calmantes.
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