Los padres y madres de la granja Escuela Casa Nuestra, que se encuentra con dos expedientes abiertos por el Ayuntamiento y la amenaza de cierre de la actividad por haber edificado en suelo no urbanizable y desarrollar una actividad sin licencia piden soluciones. Esta es la carta de una de las madres sobre la polémica que rodea este espacio:
El ayuntamiento amenaza en no dejar salir adelante un proyecto de escuela rural británica en Mataró, pionera al maresme y cargada de buenas ideas, que desde el septiembre pasado se han puesto en marcha y que funcionan.
Los niños van contentos a la escuela, motivados, aprenden pasándoselo bien, los días festivos desean que llegue el día de volver a la escuela, y sobre todo, descubren que aprender es interesante y no algo estresando, cansado y aburrido.
Y los padres nos preguntamos: El ayuntamiento, a la hora de tomar decisiones, en al algún momento ha tenido en cuenta el proyecto educativo de la escuela? Se ha planteado qué supone por los niños cerrar la escuela a 4 semanas de acabar el curso? Y que supone por las familias? Y cómo afectará a los niños emocionalmente otro cambio de escuela? Se han planteado qué harán las profesoras y el personal de servicio al paro?
Tenemos la mala sensación que el ayuntamiento se preocupa sólo por el uso del suelo, y lo utiliza como excusa para no dejar salir adelante un proyecto cargado de buenas expectativas, positivo tanto para las familias que hacemos uso, como para la localidad de Mataró, que sería la primera ciudad de España que apuesta por un proyecto de estas características, que además apuesta a la vez por el medio rural y por la sociedad, teniendo en cuenta también los más desfavorecidos colaborando gratuitamente con entidades sociales.
En esta escuela somos unos cuántos padres muy preocupados para la educación de nuestros hijos, niños que construirán el futuro de nuestro país. Somos padres que han confiado en el sistema educativo del país y que la experiencia nos ha traído a buscar alternativas. Estamos realmente angustiados y también desconcertados por qué no entendemos los motivos de tantos palos a las ruedas.
Esperamos de todo corazón que todo este ajetreo se pueda solucionar y las familias y los niños puedan continuar disfrutant y aprendiz a la escuela.
Mercè Ylla