Muy seguros tenía que ver durante los ensayos de la semana sus castellers el capataz Lluís Feliu para decidir plantar este pasado domingo en Lleida dos castillos de nuevo pisos. A los Renacuajos de Mataró a menudo se los tilda de excesivamente conservadores, pero en esta ocasión ha sido todo el contrario: a sólo una semana del Concurso de Castells de Tarragona, y con otras pandillas punteras llevando en plaza construcciones por debajo de sus posibilidades, los maresmencs pusieron toda la carne a la parrilla. Podría haber salido mal y ser un golpe bajo de cara al Concurso, pero en caso de salir bien era una inyección de moral muy alta. Los moratones apostaron fuerte, e hicieron un pleno a la quiniela.
El 3 de 9, el 4 de 9 y el 2 de 8 (o torre de 8), todo con el correspondiente forro, significan para los Renacuajos la mejor actuación del que se trae de temporada. Y a 200 kilómetros de casa, un hecho nada habitual en el mundo casteller. Sin ir más lejos, ninguna pandilla había subido antes dos castillos de 9 a la plaza de la Paeria, y esto que han pasado todas las grandes. La gesta mereció un encendido elogio por parte del capataz de los Castellers de Lleida, que en plaza propia no acabaron de tener su día y vieron como se los caía la torre de 8 y el pilar de 6 en el momento de descargarlos. Sí que completaron el 3 y el 4 de 8. Pero volvemos a los Renacuajos, porque el que más sorprendió fue la firmeza con que funcionaron los castillos. Todo hecho a la primera, ningún pie desmontado ni ninguna duda que hiciera recular los niños, ningún temblor digno de explicar. Nunca es bueno refiar-se , porque cualquier castillo es frágil de por sí, pero la maquinaria azul parece engrasada, las piezas a la medida, a punto para hacer cosas importantes al Concurso de Tarragona.
Al otro lado de la plaza, la Jóvenes de Valls hacía también buenos números con el 5 de 8, el 3 de 9 con forre y el 2 de 8 con forro.
También seguros en el Prat
En un fin de semana muy intenso, la tarde de sábado los Renacuajos también tenían actuación, en este caso en el marco de la Fiesta Mayor del Prado de Llobregat. Se compartía fiesta con los Castellers de Sants y los de Cornellà, y los moratones echaron castillos de 8 que ejecutaron sin complicaciones, el 3, el 4 y la torre, esta última la undécima de la temporada. En Lleida, el día siguiente, llegaba la docena. El gran reto está al subirla en Tarragona un piso más el próximo domingo.
El 3 de 9, el 4 de 9 y el 2 de 8 (o torre de 8), todo con el correspondiente forro, significan para los Renacuajos la mejor actuación del que se trae de temporada. Y a 200 kilómetros de casa, un hecho nada habitual en el mundo casteller. Sin ir más lejos, ninguna pandilla había subido antes dos castillos de 9 a la plaza de la Paeria, y esto que han pasado todas las grandes. La gesta mereció un encendido elogio por parte del capataz de los Castellers de Lleida, que en plaza propia no acabaron de tener su día y vieron como se los caía la torre de 8 y el pilar de 6 en el momento de descargarlos. Sí que completaron el 3 y el 4 de 8. Pero volvemos a los Renacuajos, porque el que más sorprendió fue la firmeza con que funcionaron los castillos. Todo hecho a la primera, ningún pie desmontado ni ninguna duda que hiciera recular los niños, ningún temblor digno de explicar. Nunca es bueno refiar-se , porque cualquier castillo es frágil de por sí, pero la maquinaria azul parece engrasada, las piezas a la medida, a punto para hacer cosas importantes al Concurso de Tarragona.
Al otro lado de la plaza, la Jóvenes de Valls hacía también buenos números con el 5 de 8, el 3 de 9 con forre y el 2 de 8 con forro.
También seguros en el Prat
En un fin de semana muy intenso, la tarde de sábado los Renacuajos también tenían actuación, en este caso en el marco de la Fiesta Mayor del Prado de Llobregat. Se compartía fiesta con los Castellers de Sants y los de Cornellà, y los moratones echaron castillos de 8 que ejecutaron sin complicaciones, el 3, el 4 y la torre, esta última la undécima de la temporada. En Lleida, el día siguiente, llegaba la docena. El gran reto está al subirla en Tarragona un piso más el próximo domingo.