Manel Cusachs i Corredor, que ahora nos ha dejado, ha sido una persona comprometida en muchas causas e iniciativas, más allá de las colaboraciones de prensa y sus libros dedicados a historias y personajes de Mataró. Fue el activista completo, a pesar de trabajar siempre en la empresa Diamants Industrials Rodher como oficial mecánico. El histórico periodista Jaume Guillamet, gran valedor de la prensa comarcal y amigo suyo, en el artículo que le dedicó en El Punt Avui, se refería a este aspecto. En aquellos años (50-60), los corresponsales de prensa se dedicaban fuera de su trabajo y sin tener título profesional. Este ya es uno de los méritos de Cusachs, además de su multiactivismo.
Como gran amante de la sardana fue uno de los promotores de la Agrupació Sardanista Santa Anna. Fue presidente (1962-1965) y colaboró muchos años escribiendo en sus boletines. Allí fue el alma del recital del cantante Raimon en el Velódromo, uno de los primeros de la Nova Cançó en la ciudad. El permiso gubernativo llegó al Ayuntamiento el mismo sábado a la 1 del mediodía, con todo preparado y las entradas vendidas. Me lo recuerda el sardanista Miquel Bruguera, compañero suyo de aquellos años.
La Agrupació Sardanista era una sección de la Asociación de Antiguos Alumnos de la Escola Pia, una entidad entonces muy activa que superaba las costuras del franquismo. Fue colaborador del Boletín que editaba la Asociación, con unos artículos valientes, alguno de los cuales trajo problemas.
Era uno de los padres fundadores de l’Anxaneta, modelo de escuela de pedagogía activa, mixta y en catalán, donde estudiaron sus tres hijas. Como obrero preocupado por los derechos laborales y las condiciones de trabajo fue militante de las primeras Comisiones Obreras. Políticamente se afilió a la clandestina Força Socialista Federal y después a Convergència Socialista de Catalunya y al PSC-Congrés, aunque más adelante dejó la militancia activa.
A finales de los 60 y 70 era uno de los periodistas que se hacían eco de las actividades sociales, culturales y políticas que la prensa del Régimen no publicaba. Contribuyó así al despertar democrático y catalanista, con un sesgo siempre de orientación progresista. Con otros corresponsales de las cabeceras de la capital formó el Grup de Premsa, un elemento importante en la lucha antifranquista. En el Grupo estaban Josep Català, Jaume Itchart, Pere Artigas, Teresa Carreras, Antoni Albert, Rosa Vila... El Grup de Premsa se integró en la Assemblea Democràtica de Mataró (versión local de la Assemblea de Catalunya), tomando un rol político muy activo. No puedo dejar de mencionar el libro que hicimos conjuntamente sobre la Assemblea Democràtica, el primero que el uno y el otro hacíamos.
En el Semanario El Maresme y después diario fue uno de los promotores, en sus diversas etapas (1969-1984), y uno de los responsables directos. Tras su desaparición participó en la redacción del mensual MataróEscrit y publicando trabajos en los Fulls del Museu Arxiu de Santa Maria. Formó parte de los argentonenses y mataronenses que crearon la asociación Amics de Puig i Cadafalch, de la cual ejerció la vicepresidencia de 2012 a 2024. Amante del excursionismo disfrutaba de las salidas con amigos y compañeros del Agrupe. [banner-AMP_5]
A su talante bonachón le acompañaban la sencillez y la modestia. Una vez jubilado del taller pudo dedicarse de lleno a su activismo periodístico y de investigación, colaborando con muchas iniciativas y entidades, siempre que se le requería, la mayoría de las cuales de carácter voluntario. Una gran satisfacción fue cuando obtuvo el título de periodista a partir del reconocimiento de los años de ejercicio y de superar los cursos y las pruebas pertinentes. Empezó de aficionado y acabó con el título universitario en 1993. [banner-AMP_6]