Cerca de un centenar de personas se manifestaron ayer jueves a las puertas del Ayuntamiento para mostrar el rechazo de la ciudad a la homofobia. Las entidades Tejido de Mujeres y el colectivo estudiantil Sinvergüenza convocaron esta concentración, que sirvió para condenar las expresiones del vecino de Mataró detenido para amenazar con cometer una matanza al colectivo LGTBI.
Adrian Reyes, portavoz de Sinvergüenza, leyó un manifiesto que después también trajo al Pleno municipal de diciembre. "Cuando hablamos del colectivo LGTBI no hablamos de orientaciones sexuales, sino de nuestros hijos, vecinos, compañeros de trabajo o de nosotros mismos", recordó. Reyes aseguró que el marco legislativo cada vez es más avanzado en la defensa de este colectivo, pero que todavía queda mucho camino para recorrer. "La lucha está en casa, al se aulas, en las plazas", afirmó. Gays, lesbianas, transexuals y bisexuals, afirmó, "entendemos mejor que nadie el significado de la intolerancia y la discriminación, pero también de la libertad y el respeto".
Declaración institucional
El Ayuntamiento, por otro lado, aprobó una declaración institucional que apoya al colectivo LGTBI y que también plantea la possiblitat que el Ayuntamiento, como la Generalitat, se persone como acusación popular en la causa judicial del mataroní homòfob.