La ilustradora y pintora mataronina Rosa Maria Font murió el pasado sábado, día 1, a la edad de 60 años, víctima de un cáncer. Font, que fue enterrada ayer martes, dedicó su vida profesional a la ilustración como freelance, pero desde la década de los 2000 inició una carrera artística que la trajo a mostrar su obra a varias salas de exposiciones. Font, nacida en Mataró en 1948, se estrenó como pintora en 2004 en el Espacio Renacuajo, después de recibir lecciones artísticas de dos grandes creadores mataronins, Pepe Novellas y Albert Alís, con una muestra dedicada al mundo de los cafés. Tres años más tarde, el 2007, volvió a exponer en el mismo recinto, en este caso una docena de obras de temática femenina. Admiradora del impresionismo y de figuras como Modigliani o Matisse, su obra fue evolucionando de la ilustración a un estilo más pictórico, tal y cómo se vio en el impàs entre las dos exposiciones a Renacuajo. Miembro de una familia muy relacionada con el mundo del arte, Font era la madre del joven y destacado escultor mataroní Pol Codina.
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