Que Mataró es una ciudad de gigantes se ha dicho y escrito muchas veces. Se puede comprobar buena parte de los fines de semana del calendario, cuando menudean los pasacalles y encuentros. Hay gigantes de muchos tipos, medidas, procedencias y estilos. Desde los Gigantes de Mataró (la Familia Robafaves) a gegantons y enanos. De asociaciones, de calles, de centros escolares. Y desde hace un año una pandilla que comparada con el resto es singular y destacadament joven. Seguramente debe de ser la pandilla gegantera más joven del mundo.
La pandilla de la Mecha la conforman una treintena de chicos y chicas de solo 12 años y gestionan hasta tres figuras propias, hechos por ellos. Los últimos 12 meses se han ido tirando presentes a diferentes pasacalles en las cuales y con gran coordinación y disponibilidad hay 'metxeros' que hacen bailar las figuras y también los músicos propios, a ritmo de percusión. Son amigos que precisamente el año pasado acabaron la singladura de primaria a la Anxaneta, la gran mayoría vecinos de la Habana y cercanías y cada salida que pasa van sumando elementos. Tienen ropa propia, Instagram, cargos… todo con 12 anyets. Con ayuda de los padres? Sí, por el indispensable. Pero la de la Mecha es una pandilla básicamente joven. La juventud del mundo geganter, radicado a Mataró.
Este domingo organizó un pasacalle de celebración desde Can Marfà, con figuras invitadas del Plan de en Boet, de la escuela Anxaneta o de la calle de Sant Ramon. El primero es un cumpleaños importante para celebrar y no faltó pastel ni ninguno de los elementos propios de los encuentros geganteres cómo la bailada conjunta, mucha música o un presentador que repasó la historia de la pandilla y la de sus figuras.
Los músicos de la mecha, en acción. Foto: Núria Cot
Las tres figuras de la Mecha
La mecha son todo de jóvenes vistiendo de rojo que se toman muy seriamente su proyecto de pandilla gegantera. Hacen cultura popular y gegantera en una edad singularmente baja. Se lo hacen todo ellos y tienen tres figuras: el Petardo, en Joan y en Pere. La más alta es el gegantó Petardo ("petardu", tal y cómo lo denominan) con aspecto e historia de petardo a punto para estallar. De él también viene el nombre de mecha que denomina este grupo muy avenido de amigos. Dice la leyenda propia que en Petardo tiene muchas ganas de jugar y mucha pólvora por el espíritu de gresca de los niños y niñas del barrio de La Habana. Los otros dos, en Joan y en Pere, son enanos que representan un hombre que echaba petardos y un labrador de las Cinco Sènies.
Es probable que en pasacalles de gigantes haya quienes se sorprenda de la marcha y la decisión de una pandilla de joveníssims mataronins. Son la pandilla de la Mecha, ya han hecho su primer año y por edad y ganas no es hacer travesías el decir que tienen cuerda (o en este caso mecha) por años y cerraduras.[banner-AMP_5]