Para diseñar vuestro vestuario primero hace falta que pensáis en las características del espacio disponible y después en vuestros gustos personales, puesto que un vestuario es más un espacio funcional que decorativo.
Existen muchas formas de diseñar un vestuario, pero las más habituales son los vestuarios en forma de "L" para espacios amplios donde tener la ropa a mano y poderse mover con comodidad. También hay vestuarios en forma de "Uno" que ocupan todas las paredes del aposento. Son los más adecuados para espacios no muy largos ni anchos. Otra opción es tener un vestuario separado por el pasillo, así se puede reorganizar la ropa según cada persona del hogar.
Para tener la ropa muy aseada necesitaréis perchero para las piezas largas como abrigos, chaquetas y vestidos; estantes extraíbles para los jerseys y las camisas; calaixeres con organizadores para los complementos como cinturones o pañuelos y un corbater. También conviene que disponéis de un zapatero dentro del vestuario para mantener los zapatos en orden y en buen estado.
También es indispensable contar con un espejo grande donde podéis veros como os queda la ropa que os ponéis. Escogéis espejos de cuerpo entero, si es posible, con iluminación integrada.