En vigilias del 25 de noviembre, el Día Internacional contra las violencias machistas, Mataró y una veintena de localidades catalanas más acogieron una movilización descentralizada y adecuada con los condicionantes actuales, en forma de cadena humana feminista.
En Mataró eran las diferentes vocalies de mujeres de las asociaciones de vecinos las que convocaban, entidades sociales como Dignidad Migrante y plataformas unitarias como las nuevas Arqueres Rebels, nuevo nombre de la Asamblea Feminista de Mataró. El mismo día 25, Arqueres convoca a una marcha de antorchas no mixta que saldrá de la plaza del Ayuntamiento a las 20h.
Movilización a nivel nacional
La acción a nivel catalán, impulsada por Noviembre Feminista, bajo el lema "nos queremos vivas y rebeldes" se ha hecho ante la proximidad del 25 de noviembre, que es el Día Internacional para la eliminación de las violencias de género. Además de Mataró, la movilización también se hizo a una veintena de municipios, entre los cuales Barcelona, Calella, Castelldefels, El Masnou o Piera . Las convocantes denunciaban que durante la pandemia la situación se ha agravado porque muchas mujeres han sido confinadas junto con sus agresores.
A parecer suyo, las mujeres son el colectivo más perjudicado por la crisis económica provocada por la pandemia, puesto que mayoritariamente tienen lugares de hacía a los sectores más castigados como el de la hostelería.
La organización denuncia a través de un comunicado que la pandemia ha puesto en evidencia que las violencias machistas persisten y que no hay bastante recursos públicos para pararlo. Ante esto, reclaman un sistema judicial que incorpore los estándares internacionales y cambios estructurales claves para la prevención, la atención y la protección ante las violencias machistas.