La escultura 'Fluxus', obra del artista barcelonés Marcel Camps, simboliza el movimiento de la ciudad a través de sus vías de comunicación y el movimiento en la cabeza de las personas. Esta obra se puede encontrar en la plaza del Café de Mar, creada a la avenida del Maresme entre las calles de Jaume Balmes y de Santo Agustí. El diseño de la escultura lo conforman varios caminos que se entrecruzan, se unen y se separan constantemente, formando la figura de una cabeza. Hay extremos en forma de flecha que apuntan a la boca, orejas u ojo, elementos claves en la comunicación humana. La escultura se inauguró el pasado 29 de julio con la presencia del alcalde, Joan Antoni Baron, el presidente de PUMSA Ramon Bassas y el presidente del IMAC, Sergi Penedès.
La obra de Marcel Camps tiene una forma de ninguno y está creada con tiras de fundición gris de un gruis de 2x9 centímetros que le dan forma y la hacen quedar vacía por dentro. Las dimensiones de Fluxus son de 242 centímetros de altura por 190 de longitud y 130 centímetros de anchura. El peso total es de 1.500 kilos y se encuentra enganchada en tierra gracias a unos tacos químicos de 16 milímetros de diámetro y 27 centímetros. La inversión en esta obra por parte de PUMSA se enmarca en la voluntad de la empresa municipal de destinar parte de su presupuesto a temas relacionados con la cultura, la rehabilitación y la recuperación del patrimonio de la ciudad. Pumsa fue la encargada de rehabilitar el edificio del Café de Mar, protegiendo el aspecto y conservando las fachadas, así como reurbanizar sus entornos y crear el nuevo espacio público donde se ubica Fluxus.
El artista Manel Camp es especialista al hacer esculturas representadas con duras líneas a manera de exoesquelets, como estructuras externas del cuerpo en las que queda evidente la ausencia de materia, resaltada por el vacío elocuente del interior. Esta presencia contenida le sirve al escultor para establecer un diálogo intenso entre los elementos que delimitan la estructura y las partes vacías que lo liberan.
La obra de Marcel Camps tiene una forma de ninguno y está creada con tiras de fundición gris de un gruis de 2x9 centímetros que le dan forma y la hacen quedar vacía por dentro. Las dimensiones de Fluxus son de 242 centímetros de altura por 190 de longitud y 130 centímetros de anchura. El peso total es de 1.500 kilos y se encuentra enganchada en tierra gracias a unos tacos químicos de 16 milímetros de diámetro y 27 centímetros. La inversión en esta obra por parte de PUMSA se enmarca en la voluntad de la empresa municipal de destinar parte de su presupuesto a temas relacionados con la cultura, la rehabilitación y la recuperación del patrimonio de la ciudad. Pumsa fue la encargada de rehabilitar el edificio del Café de Mar, protegiendo el aspecto y conservando las fachadas, así como reurbanizar sus entornos y crear el nuevo espacio público donde se ubica Fluxus.
El artista Manel Camp es especialista al hacer esculturas representadas con duras líneas a manera de exoesquelets, como estructuras externas del cuerpo en las que queda evidente la ausencia de materia, resaltada por el vacío elocuente del interior. Esta presencia contenida le sirve al escultor para establecer un diálogo intenso entre los elementos que delimitan la estructura y las partes vacías que lo liberan.