A la facultad de Periodismo explican que no es noticia que un perro muerda un hombre pero sí que un hombre muerda un perro. Y de aquí el título de la crónica de la primera parte de la noche del 28 de julio: Juliana, la bebida que sólo se sirve en el decurso de los Requisitos de Fiesta Mayor y que muchos 'santeros' de paladar generoso califican de extraordinaria, no se acabó enseguida, como acostumbraba a pasar, y hubo por todo el mundo. Ya el año pasado, por fin, se aumentaron significativamente los litros de bebida a servir, y este 2011 la crisis no ha recortado las raciones. Aún así el temor está muy incorporado en el alma de los mataronins, y desde antes de empezar la música las colas para obtener los tickets ya eran llarguíssimes. Algunas personas comentaban que habían hecho más de media hora de espera, y una vez ante la barra muchos pedían directamente tres tickets para consumo propio.
Mientras tanto los más bailaores no pararon de moverse a la pista de la plaza de Santa Anna, como siempre atestada esta noche, bien arrambats a la pareja gracias a las tonadas de La Principal de la Bisbal. Fueron los Requisitos de siempre, se diría que ni siquiera de año en año se cambia la tarjeta que se reparte con la orden de las canciones y que bien pocos usan, y, eso sí, a diferencia del que algunos pueden pensar, mucha gente joven siguiendo también las pasas del Baile del Fanalet o del Ramo, entre tantos otros clásicos.
La 'choni' de Castefa
Unos jóvenes que en muchos casos iban y venían entre la plaza de Santa Anna y la plaza del Ayuntamiento. Y es que detrás del consistorio actuaba uno de los grupos más de moda los últimos meses, Los Catarres, autores de una de las canciones del verano, Jenifer, que tiene por protagonistas un catalanista tradicionalista y una 'choni' de Castefa (diminutiu con el que es conocido Castelldefels). Centenares de jóvenes a la plaza del Ayuntamiento, pero desgraciadamente las calidades del sonido eran bastante mejorables: a partir de media plaza prácticamente no se sentía nada del que cantaban ni decían arriba del escenario. Los Catarres ofrecieron en poco más de una hora todas las canciones que se pueden encontrar en su web, y evidentemente Jenifer fue la más coreada, y repetida en los bisos con unos cuántos seguidores arriba el escenario acompañando el trío. Acto seguido fue el turno de los Terratombats, que hicieron menear la juventud a ritmo de rumba.
Mientras tanto los más bailaores no pararon de moverse a la pista de la plaza de Santa Anna, como siempre atestada esta noche, bien arrambats a la pareja gracias a las tonadas de La Principal de la Bisbal. Fueron los Requisitos de siempre, se diría que ni siquiera de año en año se cambia la tarjeta que se reparte con la orden de las canciones y que bien pocos usan, y, eso sí, a diferencia del que algunos pueden pensar, mucha gente joven siguiendo también las pasas del Baile del Fanalet o del Ramo, entre tantos otros clásicos.
La 'choni' de Castefa
Unos jóvenes que en muchos casos iban y venían entre la plaza de Santa Anna y la plaza del Ayuntamiento. Y es que detrás del consistorio actuaba uno de los grupos más de moda los últimos meses, Los Catarres, autores de una de las canciones del verano, Jenifer, que tiene por protagonistas un catalanista tradicionalista y una 'choni' de Castefa (diminutiu con el que es conocido Castelldefels). Centenares de jóvenes a la plaza del Ayuntamiento, pero desgraciadamente las calidades del sonido eran bastante mejorables: a partir de media plaza prácticamente no se sentía nada del que cantaban ni decían arriba del escenario. Los Catarres ofrecieron en poco más de una hora todas las canciones que se pueden encontrar en su web, y evidentemente Jenifer fue la más coreada, y repetida en los bisos con unos cuántos seguidores arriba el escenario acompañando el trío. Acto seguido fue el turno de los Terratombats, que hicieron menear la juventud a ritmo de rumba.